IEF: Banco Central afirma que principal riesgo sigue siendo el escenario externo y advierte rezago en sectores como el inmobiliario

En su Informe de Estabilidad Financiera alertó que ‘de perdurar la debilidad de la demanda, las empresas del rubro podrían requerir ajustar sus precios, reduciendo rentabilidad del negocio y su capacidad de pago’.
Si bien el Informe de Estabilidad Financiera (IEF) del Banco Central del primer semestre relevó entre otras cosas que el escenario externo continúa siendo la principal fuente de riesgos para la estabilidad financiera local, también analizó la situación interna en el país.

El documento -a través del cual el Consejo del Instituto Emisor entrega la visión respecto de principales riesgos, vulnerabilidades y mitigadores del sistema financiero y su capacidad para absorber shocks severos-, determinó que las condiciones financieras globales continúan estrechas, que los riesgos geopolíticos son relevantes y que persiste la incertidumbre acerca del inicio y velocidad de la reducción de la tasa de política monetaria en Estados Unidos.

Lo anterior, explicó el BC, ha afectado las tasas de mercado de corto plazo y advirtió que ‘puede generar correcciones abruptas de las elevadas valoraciones que muestran algunos activos financieros’.

En tanto, respecto a las tasas de largo plazo, recordó que se mantienen elevadas y los riesgos en torno al endeudamiento soberano son relevantes a nivel global.

Sectores rezagados

En el plano interno, si bien indicó que la ‘resolución de los desequilibrios macrofinancieros acumulados en años previos ha contribuido a normalizar la situación financiera agregada de los usuarios de crédito, reduciendo su carga financiera y endeudamiento’, advirtió que ‘ciertos grupos están más rezagados en la recuperación’.

Lo anterior se ha traducido en el alza de los impagos, concentrado en firmas de menor tamaño que obtuvieron créditos Fogape-Covid y de los sectores comercio, construcción e inmobiliario.

En ese contexto, el IEF recordó que ‘las vulnerabilidades identificadas en informes anteriores siguen presentes en este sector (inmobiliario)’. Así, ha continuado aumentando el stock disponible de viviendas terminadas para la venta y la vacancia de unidades para arrendar, mientras la rentabilidad del arriendo ha caído.

‘De perdurar la debilidad de la demanda, las empresas inmobiliarias podrían requerir efectuar ajustes en sus precios, reduciendo la rentabilidad del negocio y su capacidad de pago’, alertó el ente emisor.

A su vez, el documento detalló que en el primer trimestre ‘las condiciones de otorgamiento de crédito se habrían tornado más restrictivas para las empresas constructoras e inmobiliarias’.

Al respecto, durante su exposición en la comisión de Hacienda del Senado -como es habitual cuando el BC publica el IEF-, la presidenta del ente rector, Rosanna Costa, catalogó como un ‘punto de atención’ la situación en el sector inmobiliario, explicando que el mayor rezago se concentra en el segmento residencial.

La economista agregó que ‘en la medida que la tasa de política monetaria vaya bajando, el costo de financiamiento de dichas empresas debiera empezar a mitigar’.

Además, recordó que ‘las mayores tasas de largo plazo también han incidido en el costo de los créditos hipotecarios, en un contexto donde el bajo dinamismo del sector inmobiliario residencial se ha mantenido por varios trimestres’.

Concretamente, detalló que en el rubro ha seguido aumentando el stock disponible de viviendas terminadas para la venta, la rentabilidad del arriendo ha caído y se ha observado una mayor vacancia. Este es el entorno en el que el Central advirtió que se ha elevado el impago de las empresas del sector y se ha restringido su acceso al crédito.

Lo anterior, estableció el IEF, se ha visto mitigado por una menor carga financiera dadas las menores tasas de interés de corto plazo.

‘Por otra parte, en el sector no residencial, la disponibilidad de bodegas se normaliza’, sostuvo Costa.

Con todo, en su presentación ante el Congreso, Costa añadió que los ejercicios que se realizaron para el informe muestran que la economía chilena cuenta con la capacidad para enfrentar escenarios de tensión financiera.

‘Por un lado, el avance en el proceso de convergencia inflacionaria ha permitido que la política monetaria reduzca su nivel de restricción, proceso que continu ará. Esto seguirá favoreciendo mejores condiciones de financiamiento, una reducción de la carga financiera y una economía que irá acercándose a tasas de expansión coherentes con su nivel potencial’, manifestó la presidenta del BC.

En ese contexto, estimó que ‘es esperable que los sectores que hoy se encuentran más rezagados en la recuperación también mejoren su desempeño’.

Una banca resiliente

La publicación del informe estuvo precedida por la decisión que tomó este lunes el Consejo del Banco Central de mantener el Requerimiento de Capital Contracíclico (RCC) para el sistema bancario en un nivel de 0,5% de los activos ponderados por riesgo. Este requerimiento fue activado por el Central hace un año en ese nivel, como medida macroprudencial para fortalecer la resiliencia.

En medio de este escenario, en el documento destacaron que la banca ha gestionado el aumento de riesgo de crédito y ha acumulado provisiones y garantías. Las pruebas de tensión del sistema bancario, que se presentan en el IEF del primer semestre, muestran que se encuentra con un nivel de provisiones y capital suficiente para enfrentar un escenario de tensión severo.

‘Con todo, la banca deberá continuar preparándose para los próximos desafíos que enfrenta, asociados a la convergencia hacia Basilea III’, sostuvo el Central en un comunicado de prensa.

La timonel del instituto emisor explicó que ‘la banca debe seguir adecuándose a la plena entrada en vigor del Basilea III, lo que ocurrirá a fines de 2025’. Costa recordó que ‘este es un proceso que ha ido dándose progresivamente desde la aprobación de una nueva Ley General de Bancos en 2019. De hecho, su calendario de adopción tuvo ajustes durante la pandemia, precisamente para permir que la banca pudiera adaptarse de la mejor forma posible.

Respecto al Requerimiento de Capital Contracíclico, la economista añadió que ‘tal como lo anunciamos en noviembre del año pasado, durante este año hemos estado profundizando en el marco de aplicación del RCC, revisando elementos como la definición de su nivel neutral’ y adelantó que ‘una vez que tengamos una definición al respecto, esta será comunicada oportunamente’.

Comienza la segunda etapa del Programa Industrializa

Tras el término de la fase de Diagnóstico, el Programa, que cuenta con la gerencia técnica de CDT y la participación de 13 empresas, inició su nueva etapa, donde se buscará desarrollar un modelo colaborativo para la gestión de la construcción industrializada.
Gestión de Contenidos CDT
El pasado jueves 25 de abril se llevó a cabo el “kick off” de la segunda etapa del Programa Industrializa, iniciativa liderada por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), el Consejo de Construcción Industrializada (CCI) y la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios (ADI), junto a la gerencia técnica de CDT.
En esta segunda fase, que contará con la asesoría del Centro Tecnológico para la Innovación en la Construcción (CTEC), se diseñará un modelo colaborativo de gestión para la construcción industrializada.
“Ahora nos toca desarrollar la parte medular del programa, lo que nos va a permitir realizar cambios como organizaciones y adoptar nuevas prácticas”, señaló en la actividad, Janen Calle, gerenta del Programa Industrializa, agregando que la idea de este modelo de gestión es poder generar sesiones colaborativas aprovechando la generosidad de las empresas que participan. “Estas sesiones van a permitir abordar desafíos que hemos tenido como organizaciones y poder encontrar una manera de abordarlos, resolviendo los nudos que nos han impedido aplicar soluciones industrializadas”, indicó.
La actividad, que se llevó a cabo en las oficinas de CDT, ubicadas en la comuna de Las Condes, contó con la presencia de representantes de las empresas colaboradoras, así como de integrantes del Comité directivo del programa.
“Hay un gran desafío en esta etapa más técnica, donde el objetivo es que esta fase entregue herramientas a los participantes para poder enfrentar mejor los problemas y, de alguna manera, empezar a pensar en la construcción como un flujo distinto al que estamos acostumbrados”, señaló Sebastián Fourcade, representante de la CChC y Presidente del Programa Industrializa.
En la misma línea, Fernando Colchero, representante de ADI, notó el entusiasmo en los participantes. “La principal expectativa para esta etapa, que viene a ser el corazón del programa, tiene que ver con que las empresas puedan terminar con un listado de qué cosas tendrían que cambiar para poder industrializar mejor, tanto en sus procesos como en la manera en que toman sus decisiones, así como también en analizar qué cosas tendrían que cambiar a nivel de estructura, si tienen que reorganizar gerencias, crear nuevas o eliminar alguna, etcétera”, señaló Colchero, agregando que si bien ese tipo de decisiones son difíciles de implementar, sirven para empezar una discusión interna respecto a qué hay que cambiar para poder industrializar.
Por tal motivo, la definición del modelo de gestión en esta etapa resulta clave en el objetivo final del programa. “Las empresas participantes están con muchas ganas de abrir sus estantes para que nos conozcan y esa apertura es la que puede hacer cambios. Eso, en la industria en Chile siempre ha sido difícil. El sector construcción en nuestro país es más bien reacio a los cambios y aquí hay un grupo de empresas innovadoras, decididas y con espíritu de colaboración, que van por muy buen camino”, indicó, Milton Vicentelo, ex vicepresidente del CCI.
Sobre la actividad
El objetivo del evento era poder dar el puntapié inicial a la nueva etapa del programa y presentar la metodología de trabajo. “Generar un modelo de gestión dentro de las empresas es algo que significa ciertos cambios y por tanto es un desafío para todos y esperamos poder abordarlo en conjunto”, señaló Verónica Oyarzún, gerenta de Nuevos negocios de CTEC.
Luego fue el turno de Karla Quintana, jefa de proyectos de CTEC, que presentó la metodología de trabajo para desarrollar un modelo de gestión para construcción industrializada (MGCI). Durante su exposición, la arquitecta, explicó que un modelo de gestión es un esquema que guía las operaciones y decisiones de una organización para implementar una estrategia en función de sus objetivos y que se traduce en un plan que define cómo una empresa tomará decisiones, asignará recursos y alcanzará sus metas. Adicionalmente, se presentaron detalles respecto de los entregables definidos por sprint, la programación de la etapa, las sesiones y sobre la primera actividad de levantamiento de procesos que ya se ha iniciado con algunos participantes.
Tras las charlas, se desarrolló una actividad grupal entre los presentes, donde debieron reflexionar y posteriormente compartir sus opiniones respecto a las expectativas con la etapa que se está iniciando, sus impresiones en cuanto a la etapa anterior de Diagnóstico y sobre si han tenido alguna experiencia previa relacionada a la implementación de un modelo de gestión o de estrategias corporativas para implementar nuevas tendencias.
Acerca de Industrializa
Es una iniciativa de trabajo colaborativo que considera actividades que permitirá a un grupo de 13 empresas inmobiliarias participantes con constructora relacionada o vinculada, ser protagonistas de un programa que desarrollará una metodología que facilite adoptar la construcción industrializada de manera gradual. Liderado por la CChC, CCI y ADI, con el apoyo de la gerencia técnica CDT, el programa se compone de tres etapas (más una etapa “cero”), cuya segunda fase, de desarrollo del Modelo de gestión, comenzó el pasado 26 de abril. Se espera que el Programa completo tenga una duración de 36 meses.

En medio de complejo escenario inmobiliario, Toesca venderá activos por más de US$ 260 millones

No prosperaron las condiciones para una prórroga de dos años en la duración del vehículo de inversiones, ya que 5% de los aportantes optó por acogerse a retiro.
En medio de un mercado inmobiliario que atraviesa un momento complejo, con baja demanda, restricciones de financiamiento y escasez de nueva inversiones; está próximo a comenzar uno de los procesos de ventas de propiedades de mayor magnitud en el país.
Esto porque a su completa liquidación deberá salir el fondo de inversión Toesca Rentas Inmobiliarias, administrado por Toesca, luego de que no se concretara la prórroga de duración de este vehículo de inversiones por dos años más, hasta 2026. Si bien en asamblea de aportantes del pasado 28 de marzo se aprobó el aplazamiento, un porcentaje minoritario –pero superior al 5%– decidió ejercer su derecho a retiro, lo que terminó luego con el fin definitivo de este fondo que comenzó en junio de 2017 y cuyo plazo de expiración estaba previsto para el pasado 30 de abril.
La administradora del fondo había planteado a los aportantes extender en dos años el período de duración del fondo, porque visualizaba mejores condiciones de comercialización –incluyendo mejor panorama de tasas de interés– en un par de años para los activos del fondo, principalmente oficinas y centros comerciales.
Pero la propuesta no avanzó como lo esperaba Toesca, que pretendía que ningún aportante ejerciera derecho a retiro. Ahora, el fondo debe salir a vender los activos inmobiliarios por más de US$ 260 millones, en un plazo que deberá zanjar la asamblea de aportantes el 30 de mayo.
Entre los aportantes están las corredoras de bolsa de BTG Pactual Chile, Bice Inversiones y LarrainVial. No fue posible obtener comentarios de esas firmas. En Toesca indicaron que ninguno de los inversionistas institucionales estuvo dentro del 5% que se acogió a retiro.
Activos y el ambiente
Entre los activos inmobiliarios destacados del fondo están sus participaciones societarias en los fondos que, por ejemplo, tienen el edificio de oficinas de Apoquindo 4501 –que construyó Paz Corp y que tuvo otros dueños antes– y la Torre A de Parque Titanium, arrendada a Scotiabank. Se suman, entre otros, las propiedades comerciales Paseo Viña Centro, Paseo Machalí, una residencia de adultos mayores, bodegas y el edificio Apoquindo 3001.
Según un documento de Toesca Rentas Inmobiliarias –de enero de 2024–, el fondo tenía préstamos bancarios por $146.233 millones y la rentabilidad bursátil de este vehículo de inversión era negativa en todas sus series, desde que comenzó.
Algunas firmas de asesoría inmobiliaria consultadas por el tema afirmaron que se está empezando a mover el mercado en cuanto a los paquetes de propiedades que se podrían poner a la venta. En el sector señalaron que se trata de activos de alta calidad, pero que podrían sufrir un castigo en el precio, debido a la coyuntura en la que saldrán a ofrecerse si se define que ello sea en el corto plazo. Esto porque los compradores hoy no abundan y el financiamiento está caro. Agregan que para 2026 –año al cual se esperaba prorrogar el vencimiento del fondo– hay mejores perspectivas económicas de negocios bajo un nuevo gobierno.
De todos modos, desde Toesca aseguran que el fondo saldrá a vender de forma ordenada sus activos en un plazo razonable.
Argumentos de Toesca
La administradora señaló en un documento de marzo, con motivo de la asamblea de aportantes, que el fondo tiene una vacancia de cerca de 10%, concentrada en los edificios de oficinas y en un centro comercial en Curicó. Indicó que las torres de oficinas están en el eje Apoquindo y el sector de El Golf, pero reconoció que el mercado se ha visto afectado tras la pandemia por el trabajo remoto, “lo que ha llevado a empresas a disminuir el metraje de las oficinas que arriendan”.
Añadió en dicho texto que el edificio Apoquindo 4501 “enfrenta un desafío relevante para los próximos dos años, puesto que vencen contratos que estimamos podrían renegociarse a la baja producto de que hoy sus rentas están por sobre el promedio de mercado. Sin embargo, a partir de 2026 comenzarán a vencer, en mucho mayor proporción, contratos que fueron negociados en su mayoría en los últimos tres años, en que el mercado estuvo muy desafiado por mayor oferta y poca demanda; estimamos estos contratos tienen probabilidad de renegociarse al alza, por encontrarse a tarifas que estimamos bajo mercado (…). Lo anterior sugiere que el momento de vender dicho activo debería ser no antes del año 2026 e incluso 2027”.
Respecto del centro comercial de Curicó –adquirido en 2019–, Toesca señaló que en el documento que “es un activo aún inmaduro, que está en pleno proceso de arrendamiento, y que requiere de tiempo para llegar a su estabilidad”.
La administradora agregó que “considerando lo anterior y la situación del resto de los activos del fondo, proyectamos que el NOI (ingreso neto operacional) del fondo debería subir de 305.000 UF el 2023 a niveles de 348.000 UF a 2026, de la mano de una disminución de la vacancia”.
Por otro lado, Toesca indicaba que se espera que las tasas de interés disminuyan paulatinamente y que tipos de interés más bajos redundan en una expectativa de precio más alto al momento de vender los activos.

Creación de nuevas empresas vuelve a caer en febrero y suma tres meses en rojo

El indicador registró una baja de 1,4% el segundo mes del año, según el Banco Central.
Los emprendimientos aparentemente experimentaron un inicio de año algo complicado, pese a que se han constatado cifras positivas de la actividad, que hablan de una recuperación notoria en el primer trimestre.

De acuerdo con los Indicadores de Dinámica de Empresas (IDE) del Banco Central, las nuevas firmas registraron una caída anual de 1,4% en febrero, al sumar un total de 9.958 las que entraron al mercado en el segundo mes del año.

Dado lo anterior, el indicador completó tres meses en rojo.

En este contexto, 705.132 empresas declararon ventas en febrero, lo que significó un alza interanual de 3,8%.

Los IDE son elaborados a partir de información entregada por el Servicio de Impuestos Internos (SII).

Detalle por sectores

Desagregadas por tamaño, 8.195 nuevas firmas fueron microempresas; 1.640 correspondieron a pequeñas; y las medianas y grandes aportaron con 97 y 26, respectivamente.

Por sectores, el comercio es el que más sumó a la creación de empresas en febrero (3.216), seguido por servicios personales (1.447) y servicios empresariales (1.125).

En la otra vereda, las que menos contribuyeron fueron actividades inmobiliarias (152), EGA y gestión de desechos (54 ) e industria minera, con solo 29.

Entre las empresas que declararon ventas, 275.722 fueron del comercio. Le siguieron la industria manufacturera con 74.473 y transporte con 65.744. Las que menos aportaron fueron actividades inmobiliarias (11.027), EGA y gestión de desechos (4.472), y minería (2.137).

Por tamaño, la mayoría fueron microempresas (450.350), mientras que 218.240 fueron pequeñas y 25.156, medianas. Las grandes sumaron un total de 11.286.

Nuevo proyecto inmobiliario en Iquique por US$ 30 millones

El grupo inmobiliario y constructor Miramar, representado por Víctor Becerra, inició los trámites para el desarrollo de un nuevo edificio de 30 pisos en el borde costero de Iquique. La obra -Edificio Distrito Cavancha 3 y que considera una inversión de US$ 30 millones- se emplaza en un terreno de 5.451 m2 en la calle Santa Coloma de Farnes 908 y 912.

La empresa presentó una consulta de pertinencia para que la autoridad defina si la obra debe o no ser sometida a evaluación ambiental. ‘No obstante que el proyecto no debe ser sometido a evaluación de impacto ambiental, cuestión que deberá quedar consignado en la resolución que emita el Servicio de Evaluación Ambiental de la Región de Tarapacá, se hace presente que el titular observará y ha dado y dará cumplimiento a todas aquellas normas’, dijo.

Fuerte alza en precios de arriendos en el Gran Santiago: han subido hasta 53% desde antes de la pandemia

Hoy, arrendar un departamento de 1 dormitorio y 1 baño en Las Condes cuesta $707.645, 14% más que hace un año. La misma propiedad rentada en Providencia vale $563.904 (10% más) y en Ñuñoa $453.335 (6% más caro). En el mercado aseguran que los precios de los arriendos se han estabilizado en los últimos meses, con una variación anual real de 8,1% en promedio para departamentos. En su último IPoM, el Banco Central alertó de las alzas en los arriendos de propiedades.
En la página 27 del último Informe de Política Monetaria (IPoM), correspondiente al mes de marzo, el Banco Central (BC) puso de relieve una inquietud que no había explicitado en reportes previos. ‘En el último mes, también se observó una aceleración importante en servicios, aunque concentrada en un número acotado de productos, entre los que destaca el precio del arriendo. Este último marcó una elevada variación mensual en febrero, más allá de los patrones usuales de indexación a la inflación pasada, la que será importante monitorear para comprender mejor sus causas y determinar su persistencia’, recalcó.
El instituto emisor precisa que el arriendo es el producto con mayor ponderación (7,2%) en la medición del IPC. ‘Además, es parte del IPC sin volátiles y de otras medidas de tendencia inflacionaria’, subrayó el ente emisor al ser consultado por este medio.
El BC explica que en febrero pasado, previo a publicarse el IPoM de marzo, ‘los precios de los arriendos tuvieron un aumento (1,7% mensual) por encima de lo observado en los meses previos, que se alejó de los patrones usuales de indexación de los arriendos a la inflación pasada’. Dado lo anterior, agregó, ‘resulta importante evaluar las razones detrás del aumento de los arriendos en febrero y monitorear su persistencia en el tiempo. En todo caso, en marzo, el precio del arriendo mostró una variación acorde con patrones habituales de indexación’.
Una preocupación que también existe en el mundo privado, donde se palpa una escalada de precios desde antes de la pandemia. ‘Los valores de los arriendos y sus volúmenes se han visto afectados por variaciones no habituales para un mercado en ‘régimen’, como podría haber sido antes del 2020′, expresa Sergio Bunster, presidente de la Asociación de Corredores de Propiedades (Acop). Y enumera las principales causas del alza de los valores para rentar propiedades: menor compra de viviendas, debido a un aumento del costo del crédito y mayores exigencias de parte de los bancos para otorgarlos; sumado a la demanda extraordinaria impulsada por la inmigración y la incorporación de multifamily, esto es, inversionistas que adquieren edificios completos y los destinan a arriendo, elevando con ello el consumo por este tipo de bienes, menciona Bunster. A ello hay que sumar los altos niveles de inflación que golpearon a la economía los últimos años.
Al cierre del primer trimestre de este 2024, los precios muestran comportamientos dispares entre las distintas comunas. Así, según datos de la consultora inmobiliaria TocToc, hoy arrendar un departamento de 1 dormitorio y 1 baño en Las Condes cuesta $707.645, 14% más que hace un año. La misma propiedad rentada en Providencia vale $563.904 (10% más) y en Ñuñoa $453.335 (6% más caro). Los precios de arriendo en La Florida y San Miguel también se han encarecido en 6% versus igual período del año pasado.
Pero en sentido inverso, los valores han caído en Vitacura (-9,4%), Lo Barnechea (-8,5%), Estación Central (-1,7%) e Independencia (-1,5%).
Alza de hasta 65% en año peak
El año 2022 marcó un registro histórico para el mercado de arriendo de viviendas en la Región Metropolitana, con una demanda que alcanzó niveles peak. Tanto así que las propiedades ubicadas en comunas del sector oriente de la capital alcanzaban a estar disponibles en el mercado apenas cinco días antes de arrendarse. Y en total, la oferta completa para arriendo en la RM permanecía unos 25 días en promedio. Esa velocidad de ocupación implicó que las propiedades ofrecidas en arriendo también anotaran mínimos históricos, con menos de 3 mil viviendas disponibles en la RM, impulsando de paso los precios al alza.
‘Los cánones de arriendo alcanzaron el valor más alto el primer trimestre del 2022 en términos reales (expresados en UF). Este período coincide con el mayor nivel de liquidez de la economía y una sensación generalizada de alto poder adquisitivo’, asevera Reinaldo Gleisner, vicepresidente de Colliers.
En esa época y según datos de TocToc, arrendar un departamento de 1 dormitorio y 1 baño —que se considera el más representativo— en Las Condes costaba en promedio al mes $564.552, 32% más caro que un año antes. Ese mismo departamento arrendado también el primer trimestre de 2022 en Lo Barnechea valía $621.322, 52% más que 12 meses antes, mientras que rentarlo en Providencia tenía un valor de $583.475, 65% más que en igual período del año previo.
Para un departamento de iguales características, hace dos años el alza anual fue de 29% en las comunas de San Miguel (con un valor promedio al mes de $309.084) y Estación Central ($252.314), de 28% en Santiago ($283.853) y de 20% en Ñuñoa ($403.702).
Pero desde entonces, el mercado de arriendos se ha estabilizado, y la oferta disponible ha tenido un aumento anual de cerca de 37%, bordeando las 12 mil unidades disponibles —10 mil departamentos y 2 mil casas—, elevando a la vez los plazos de arriendo promedio a 45 días para departamentos y a 42 días en casas, indican en la consultora TocToc. Junto con eso, el avance de los precios se ha moderado.
‘Se ha vuelto al volumen de oferta previo a la pandemia y en precio, lo que hemos podido apreciar es que los arriendos se han estabilizado en los últimos meses, con una variación anual real de 8,1% en promedio para departamentos’, explica Nicolás Herrera, Head of Real Estate Research de TocToc.
En términos reales —descontando la inflación—, los arriendos han caído en promedio 10% desde el valor más alto registrado ese primer trimestre de 2022 y el mismo período de 2024, precisa Colliers. No obstante, comparados con el período prepandemia, los precios actuales reflejan alzas exponenciales.
Por ejemplo, según datos de TocToc, si se toma en cuenta el valor de arriendo del departamento más representativo, que es de 1 dormitorio y 1 baño, en la comuna de Santiago su precio promedio mensual subió desde $241.941 en el primer trimestre de 2020 a $302.223 en igual lapso de 2024. Es decir, su costo aumentó 25% en cuatro años. El alza es de 24% considerando igual departamento arrendado en San Miguel (desde $253.327 a $313.280) y de 32% para la comuna de Ñuñoa (de $344.410 a $453.335). El salto incluso es mayor en Independencia, de 33% (de $207.785 a $276.424), aunque menor en Estación Central, con un avance de 21% en el precio promedio de arriendo (desde $216.324 a $261.681).
Mientras que en las comunas de Lo Barnechea, Las Condes y Providencia se verifica la mayor escalada en los valores para arrendar, con un alza de 53%, 48% y 46%, respectivamente. De esa manera, para arrendar un departamento de 1 dormitorio y 1 baño hay que desembolsar al mes $851.385 en Lo Barnechea, $707.645 en Las Condes y $563.904 en Providencia.
¿Qué esperar a futuro?
El mercado estima que se mantendrá la tendencia al alza. ‘Referente a los arriendos, creo que se está produciendo un proceso de ajuste entre la oferta y demanda, y no veo grandes variaciones en un futuro próximo, donde la rentabilidad que exigirán los propietarios a sus arrendatarios rondará del orden del 5% al 6% anual del precio real de la propiedad’, prevé el titular de Acop, Sergio Bunster.
Tampoco ve grandes variaciones en el precio de las propiedades, ‘considerando que los valores de los arriendos están clara y habitualmente indexados a los valores de las propiedades. Y estas han ido disminuyendo los stocks, no hay nuevos proyectos y cuando las condiciones políticas y financieras se vayan estabilizando, pasarán algunos años antes de poder contar con una oferta adecuada a una eventual mayor demanda (…) Veo un Chile que, después de haber estado entre los top ten de propietarios mundiales con casa propia, vamos en vías de ser un país de arrendatarios’.
Colliers, a su vez, estima que ‘ante la progresiva normalización monetaria propia del ajuste impulsado por el Banco Central, y una vez que las remuneraciones tomen un ritmo de crecimiento en términos reales, los arriendos también se recuperarán’.
Menos metros cuadrados
Además de exhibir un alza de precios, otro fenómeno que se ha verificado es el arriendo de viviendas más pequeñas. Así, por ejemplo, si a mediados de 2022 la superficie promedio de casas que se arrendaba era de 226 metros cuadrados, hoy es de 172 metros cuadrados promedio, precisan en TocToc. Entonces, había 600 casas en oferta y actualmente hay 1.700 viviendas.
En departamentos la tendencia es similar. En 2022, la superficie promedio de arriendo era de 78 m2 y hoy es de 60 m2, donde las comunas de Santiago, Ñuñoa, Providencia y Las Condes concentran el 50% de esa oferta.
‘Hoy, un departamento de 54 m2 en Ñuñoa se arrienda en 16,2 UF/m2 y en La Florida uno de 46 m2 a un promedio de 11,6 UF/m2. Mientras las casas de entre 120 y 140 m2 lo hacen a un precio de 54,3 UF en Lo Barnechea, Vitacura, Las Condes y Providencia’, grafica Nicolás Herrera, de TocToc.

Los pasos del Banco Central para dimensionar el efecto del cambio climático en la economía chilena

La autoridad monetaria se unió a la Red por el Enverdecimiento del Sistema Financiero en 2021, instancia que cuenta con 138 miembros internacionales.
El cambio climático ya está afectando a la economía y los bancos centrales del mundo han debido sumar este elemento en sus análisis sobre la actividad productiva y finanzas. Y Chile no se ha quedado atrás, particularmente cuando personas y empresas están sufriendo los efectos de eventos extremos, como sequía, una mayor cantidad de incendios forestales e inundaciones en distintas partes del país. De ahí que el instituto emisor local se unió en 2021 a la Red por el Enverdecimiento del Sistema Financiero (NGFS, por sus siglas en inglés), grupo que reúne a bancos centrales y supervisores de todo el mundo para intercambiar experiencias, compartir prácticas y contribuir al desarrollo de la gestión del riesgo medioambiental y climático en el sector financiero. La instancia cuenta con 138 miembros y 21 observadores, entre los que están el Banco Central Europeo (BCE), la Reserva Federal y el Banco de Inglaterra (BoE). “El cambio climático y las políticas orientadas a descarbonizar la economía ya tienen impactos que podrían profundizarse en el tiempo sobre la macroeconomía y, si ello ocurre, podría tener efectos para la estabilidad financiera”. “El cambio climático y las políticas orientadas a descarbonizar la economía ya tienen impactos que podrían profundizarse en el tiempo sobre la macroeconomía y, si ello ocurre, podría tener efectos para la estabilidad financiera”, afirma el gerente de la División Política Monetaria del Banco Central chileno, Elías Albagli. De ahí que la agenda de investigación y de generación estadística de la entidad monetaria ha comenzado a incorporar el medio ambiente en su análisis para entender y adelantarse a los desafíos. Una dimensión que se une al mandato principal del ente emisor, que es mantener la inflación baja y estable en el tiempo, junto con promover la estabilidad y eficacia del sistema financiero. Albagli explica que se identifican dos tipos de impactos macroeconómicos asociados al cambio climático: físicos y de transición. Los primeros corresponden al daño que los eventos climáticos extremos y el cambio de tendencia del clima -como las sequías extremas, incendios forestales e inundaciones- pueden provocar sobre las actividades económicas y humanas. De hecho, una secuela de índole socio-económica podría ser precisamente un impulso a las migraciones de personas. Los efectos de transición, a su vez, son aquellos relacionados con las políticas de mitigación y adaptación que podrían ser implementadas para aminorar los de carácter físico. Entre estos, están, por ejemplo, los recursos que se requieren para transitar hacia una economía con una matriz energética baja en carbono. “Por lo tanto, para continuar elaborando proyecciones económicas que tomen en cuenta los cambios del entorno, es necesario incorporar los impactos asociados al cambio climático en nuestras herramientas de análisis”, afirma Albagli. Líneas de acción Como parte de las medidas que el banco ha tomado para mejorar el entendimiento de las consecuencias macroeconómicas del cambio climático, la división de Estadísticas del Central ha trabajado en el diseño de nuevos indicadores de carácter experimental que permitan informar sobre el estado actual y la evolución del capital natural en Chile, siguiendo el marco de estadísticas económicas y medioambientales de Naciones Unidas. En paralelo, las unidades de la División de Política Monetaria avanzan en la extensión de los modelos y metodologías empíricas para incorporar este tema, junto con una agenda de investigación para proveer un mejor entendimiento de los canales a través de los cuales ocurren dichos impactos. En el caso de la División de Política Financiera de la entidad monetaria, la tarea ha sido incorporar los riesgos climáticos en sus evaluaciones de estabilidad financiera con el objetivo de identificar posibles vulnerabilidades y, de esta forma, mejorar las prácticas de gestión y supervisión de riesgos. Experiencia comparada Una encuesta publicada por la NGFS en julio del año pasado sobre cambio climático y política monetaria -y que incluyó a 55 de sus miembros-, constató que la mitad aseguró que sus economías ya habían sufrido daños causados por impactos físicos crónicos del cambio climático en la última década. De los resultados, el 79% apuntó a que la mayor parte de los análisis realizados se han centrado en los fenómenos y tendencias nacionales (79%), mientras que una proporción menor ha estudiado los impactos procedentes del exterior (21%). Además, el 70% de los encuestados se mostró preocupado por los efectos económicos negativos de riesgos físicos agudos más generalizados a lo largo del tiempo, como sequías e inundaciones. Frente a esto, el 47% ya ha realizado trabajos analíticos acerca de las expectativas de que los efectos físicos del cambio climático se intensifiquen y el 56% ya está trabajando para mejorar su comprensión de los efectos macroeconómicos en el futuro. Acerca de los efectos de la transición hacia una economía carbono cero, el 35% de los consultados señaló haber experimentado diferentes impactos macroeconómicos asociados a las políticas de transición y esperan que estos impactos sean más consecuentes a lo largo del horizonte de la política monetaria.
Cambio Climático Banco Central economia chilena

Ocde mejora las perspectivas para Chile y pide reducir la burocracia para los proyectos, junto con una reforma tributaria

El organismo internacional proyecta que el país crecerá 2,3% en 2024 y 2,5% en 2025. Sostiene que «la confianza empresarial ha mejorado», pero advierte que «el crédito estancado seguirá frenando el crecimiento de la inversión durante 2024?.
-La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde) mejoró su visión sobre el futuro de la economíachilena y tiene mayor optimismo sobre el futuro del Producto Interno Bruto (PIB) local que otros importantes organismos internacionales.
En concreto, elevó sus proyecciones de expansión para Chile del 1,8% informado en noviembre pasado al 2,3%, para 2024. En noviembre las había bajado de 1,9% a 1,8%.
«Una recuperación de los salarios reales, favorecida por la caída de la inflación y condiciones financieras más flexibles, respaldará una repunte del consumo en 2024-25,?dijo la Ocde en su reciente informe.
Sin embargo, su mejor mirada también advierte que «la confianza empresarial ha mejorado, pero el crédito estancado seguirá frenando el crecimiento de la inversión».
Otra de las amenazas que resalta para Chile es una mayor desaceleración de China, teniendo una caída en la demanda de metales. Esto, en el contexto que la superpotencia es el principal comprador de metales del mundo, primer socio comercial de Chile y la principal exportación del país son materias primas.
El calentamiento global fue otra de las amenazas para Chile ante los daños que pueda generar su avance en la economía (como incendios y sequías), bajando el crecimiento y requiriendo más gasto estatal. Otro de los llamados fue a generar acuerdos, ya que estimó que la fragmentación política puede frenar «las reformas tan necesarias».
Las proyecciones del organismo internacional se ubican por sobre la que anunció hace poco el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, ambas instituciones ven al país creciendo 2% este año. En tanto, en su reciente Informe de Política Monetaria (Ipom), el Banco Central estimó que el contexto da para prever un crecimiento de entre 2% y 3% para este año. Mientras que, las proyecciones del gobierno del Presidente Gabriel Boric estiman para este año un crecimiento de 2,5%.
Para 2025, el organismo también elevó su proyección de 2,1% a 2,5%, una mirada en línea con el FMI y por debajo de la del Banco Mundial (2,2%).
En su análisis sobre Chile, la Ocde también ve como la demanda de minerales apoyará el crecimiento de las exportaciones en Chile. Mientras que, sobre la inflación, el organismo la ve llegando a su rango meta del 3% a mediados del 2025.
Otro de los argumentos para sus proyecciones es que ven al Banco Central reduciendo la Tasa de Política Monetaria en forma sostenida y llegando una tasa neutra a mediados del 2025. Además, la Ocde asume que habrá una política fiscal menos expansiva entre 2024 y 2025, y que los niveles de deuda se mantendrá de forma sostenible.
En su informe de perspectivas, la Ocde estimó que Chile debe avanzar en reducir la burocracia de la tramitación de permisos para los proyectos de inversión y en una reforma al sistema tributario.
«La competencia y el espíritu empresarial se ven sofocados por procedimientos regulatorios largos y complejos. Revisar el conjunto de regulaciones, pasar a esquemas de ‘licencia cero’ y procedimientos digitales siempre que sea posible, junto con un mayor gasto en investigación y desarrollo, puede ayudar a aumentar la productividad y el crecimiento», dijo la Ocde en su informe.
Mientras que, la reforma en materia de impuestos comentó que se debe «hacer que el sistema tributario sea más ecológico y progresivo y al mismo tiempo mejorar la administración tributaria». Un trabajo que la Ocde ve que puede aumentar la capacidad de gasto para reducir «significativamente las desigualdades y financiar proyectos verdes que respalden la descarbonización».
Las economías de mayores ingresos en América Latina tendrán un crecimiento modesto este año y el próximo, a excepción de Argentina, debido a que la demanda externa continúa siendo débil, dijo la Ocde.
El organismo, que tiene su sede en París, dijo en su informe semestral de perspectivas para la región que, en promedio, las principales siete economías latinoamericanas crecerán 1,4% este año y 2,4% en 2025, una ralentización después del avance del 1,9% de 2023.
«En 2025, las perspectivas para la región tienen un tono más positivo, asociado a un mayor crecimiento de la demanda externa, y una menor inflación, ya dentro de los rangos meta de los bancos centrales», dijo el informe.
Pero los riesgos económicos continúan sesgados a la baja, ya que «las tensiones geopolíticas globales y la volatilidad en los mercados financieros globales podrían tener un impacto negativo sobre la región», advirtió.
Los desastres climáticos y su efecto en la economía fueron otras de las alertas.
En el desglose de proyecciones, Costa Rica encabeza el crecimiento con un avance previsto de un 3,6% para este año, mientras que Perú y Chile siguen, ambos con un 2,3% en 2024, con perspectivas de otro repunte para el próximo año gracias a una esperada recuperación de los salarios que elevará el consumo y un relajamiento de la política monetaria.
Entre las economías de mayor peso, el organismo espera una ralentización en Brasil al 1,9% desde la expansión de 2,9% el año pasado y una desaceleración en México al 2,2% en 2024 desde el crecimiento de 3,2% del 2023.
En Brasil, la principal economía de la región, la Ocde considera que el gasto de los hogares será el motor clave de crecimiento, alentado por un robusto mercado laboral; un escenario similar al de México, donde la solidez del empleo sostendrá la demanda interna.
Las perspectivas para Colombia también ofrecen cierto optimismo, puesto que se proyecta un repunte parcial de la inversión a medida que mejoran las condiciones financieras, aunque la inflación ha continuado en niveles elevados a pesar de su trayectoria decreciente.
El informe llama la atención sobre la situación de Argentina, donde prevé que la economía se contraiga 3,3% este año por el impacto de la hiperinflación y los severos ajustes fiscales que considera «necesarios», pero que lastran el consumo. Para el 2025, estima una recuperación del PIB al 2,7%.
«La consolidación fiscal anunciada debería continuar», señaló el reporte sobre la economía argentina. «Junto con el fin de la financiación monetaria y el refuerzo del balance del banco central, dicha consolidación restablecerá la estabilidad macroeconómica», añadió.

Expectativas de crecimiento del PIB se asientan de 2,5% hacia arriba para 2024, pese a menor Imacec de marzo

El Banco Central informó que el Imacec de marzo creció 0,8% en doce meses, situándose en la parte baja de las proyecciones de los economistas, que tenían un rango entre 0,3% y 2,4%. De todos modos, con ese número la expansión del primer trimestre sería de 2,5%, la mayor desde abril-junio de 2022, mientras para el año las previsiones se afianzan entre 2,5% y 3%.
Se esperaba que fuera un menor crecimiento al registrado en enero (2,3%) y febrero (4,5%), y así fue, pero en un magnitud algo mayor a lo previsto. El Banco Central (BC) informó este jueves que el Imacec de marzo se expandió 0,8% en doce meses, situándose en la parte baja de las expectativas de los economistas, que tenían un rango entre 0,3% y 2,4%.

Pese a este resultado más acotado, el crecimiento de la actividad económica del primer trimestre del año habría sido de 2,5%, constituyendo su mayor alza desde el segundo trimestre de 2022, cuando anotó un aumento de 4,4%.

La serie desestacionalizada, en tanto, disminuyó 0,7% respecto del mes precedente y creció 2,1% en doce meses. El mes registró tres días hábiles menos que marzo de 2023.

¿Qué explicó esta alza? Lo primero que menciona el Banco Central es que la producción de bienes aumentó 3,7% en términos anuales, incidida principalmente por el incremento de 8,2% de la minería y del resto de bienes que creció 2,7%, impulsado por la generación eléctrica. En tanto, la industria cayó 2,3%.

Asimismo, el comercio presentó una disminución de 5,3% en términos anuales, explicada por el comercio automotor y mayorista. En el primero destacaron las menores ventas de vehículos, y en el segundo, las ventas de alimentos. En contraste, las ventas minoristas crecieron.

Por su parte, los servicios aumentaron 0,5% en términos anuales, donde se registraron crecimientos en la mayoría de sus actividades, destacando los de transporte. Esto fue en parte compensado por la caída de los servicios empresariales.

El Imacec no minero, a su vez, presentó una disminución de 0,4% en doce meses, mientras que en términos desestacionalizados cayó 0,6% respecto del mes anterior.

Desde el gobierno valoraron la variación, pese a que fue menor a las de los meses previos: ‘Estas cifras, si bien son inferiores a lo que esperaba el mercado, están dentro de lo que esperamos como Ministerio de Hacienda, considerando que el mes de marzo tuvo tres días hábiles menos y que por esa razón eso resta alrededor de un punto y medio de crecimiento en la variación en 12 meses. Por lo tanto, si sumáramos ese punto y medio más al 0,8% de crecimiento en 12 meses, vamos a tener una cifra bien similar al 2,5% de crecimiento que estamos proyectando para el año’, sostuvo el titular de esa cartera, Mario Marcel.

Entre los expertos la visión es relativamente positiva, puesto que la mayoría señala que no cambia, y por el contrario, afianza, la perspectiva de que la expansión del PIB de Chile en 2024 será de entre 2,5% y 3%. Dicho de otra forma, de no haber una crisis global mayor, con el cierre del primer trimestre se asegura el piso de 2,5% para el crecimiento de la economía este año.

Valentina Apablaza, economista del OCEC-UDP, señaló que ‘las cifras de marzo no cambian nuestro escenario base, por lo que mantenemos nuestra visión de que la economía estará más cerca de un 2,5% que de un 3% (en 2024), en línea con un mayor crecimiento durante el segundo trimestre, pero que se irá moderando en la segunda mitad del año’.

Alejandro Fernández, economista de Gemines indicó que ‘el rango sigue siendo razonable, y por ahora, al menos, me parece más probable que (el resultado del año) esté más cerca de 3%’. De hecho, ajustó su proyección apenas levemente a la baja, de 3% a 2,9%.

En tanto, Felipe Alarcón, economista de Euroamerica, puntualizó que no ve ‘un impacto material en la proyección para el año producto de este dato en particular, por ello, mantenemos nuestra proyección de 2,7%’.

A su vez, Esteban Viani, economista y académico de la Universidad Autónoma, añadió que ‘los datos del Imacec de marzo, al estar en la banda inferior de las expectativas, llegan a confirmar la perspectiva del PIB anual del 2,5% o 3%. En ningún caso creo que se podrían mover estas perspectivas hacia abajo de estas cifras’.

Sergio Lehmann, economista jefe de Bci, puntualizó que ‘si bien el Imacec de marzo se trató de una cifra bajo lo anticipado, no cambia la perspectiva general para el año. Estamos más cerca de todas formas del 2,5%, entendiendo que la economía reconoce factores estructurales que frenan un mejor desempeño’. No obstante, el economista advierte algunos riesgos: ‘Del lado global, si la inflación en Estados Unidos no desciende más rápido, veremos tasas de interés más altas y un menor crecimiento mundial’, dijo.

Por su parte, tras el Imacec de marzo, JP Morgan afianzó su proyección de expansión del PIB del año de 2,7%.

Finalmente, en Coopeuch mantuvieron la visión de que el PIB de 2024 será de 3%. ‘Es importante destacar que, con este resultado, el escenario de actividad delineado en el último Ipom sigue plenamente vigente’, sostuvieron.

Gobierno propone nueva agencia para sacar al pizarrón a los programas estatales y ayudar al crecimiento

El Ejecutivo ingresó la semana pasada a la Cámara el proyecto que crea la Agencia para la Calidad de las Políticas Públicas y la Productividad, uno de los compromisos contenidos en el pacto fiscal y cuyos alcances explica la subsecretaria de Hacienda, Heidi Berner.
El denominado pacto fiscal, que el Gobierno está empeñado en aprobar en el Congreso, no contempla solo cambios tributarios. En el marco del trabajo prelegislativo con los partidos oficialistas y de oposición, el Ministerio de Hacienda se comprometió no solo a considerar modificaciones de impuestos, sino que también a incorporar medidas para impulsar el crecimiento, mejorar la productividad de la economía y reforzar el control sobre el buen uso de los recursos públicos.

Y aquel compromiso ya se materializó en los últimos días, ya que el pasado 23 de abril el Ejecutivo ingresó a la Cámara de Diputados el proyecto de ley que crea la nueva Agencia para la Calidad de las Políticas Públicas y la Productividad.

Esta nueva institución viene a reemplazar a la actual Comisión Nacional de Evaluación y Productividad (CNEP), creada en el año 2015, y también asumirá algunas funciones que actualmente recaen en la Dirección de Presupuestos (Dipres), por lo que centralizará todo lo relacionado con evaluación de eficacia, eficiencia y coordinación de las políticas, normas, planes y programas de los órganos del Estado, así como las buenas prácticas regulatorias para aumentar la productividad y el crecimiento económico.

‘El objetivo de este proyecto es justamente potenciar la institucionalidad de la Agencia Nacional de Evaluación y Productividad. Y en ese potenciamiento, llevarlo a un status distinto’, explica a la subsecretaria de Hacienda, Heidi Berner.

Los principales cambios

La nueva entidad tendrá siete actividades principales.

La primera es que se encargará de la evaluación ex post de los programas estatales, tomando así una potestad que hoy recae en la Dipres.

Según detalla Berner, aquello se realizará sobre la base de un Plan de Evaluación de Resultados, para cuya elaboración la agencia deberá consultar a ministerios y a la comisión especial mixta de Presupuestos del Congreso. Las evaluaciones derivarán en un informe final que incluirá resultados, hallazgos, una categoría de desempeño y sugerencias para optimizar políticas, planes y programas.

La subsecretaria explica que con esto se busca alinear las evaluaciones de programas y sus resultados con las necesidades tanto del Ejecutivo como del Legislativo.

Asimismo, señala que la idea es lograr que cada año se evalúe cerca del 25% de los programas estatales, llegando a un 100% de cobertura al cabo de cuatro años.

‘Eso no lo podrías hacer si esa facultad sigue estando dentro de la misma Dipres. Es importante que la agencia tenga su propia institucionalidad para efectos de la evaluación’, dice la economista.

Una segunda actividad será la promoción de buenas prácticas regulatorias, fijando objetivos y lineamientos para mejorar la gestión y calidad normativa, así como el monitoreo de su implementación en base a principios como ‘proporcionalidad, responsabilidades, transparencia e innovación’, sostiene el proyecto.

La agencia también estará a cargo de la evaluación de impacto regulatorio ex-ante. O sea, entregará un análisis sobre el impacto económico de determinados proyectos de ley de iniciativas presidencial y decretos supremos.

Aquí, la agencia tendrá una facultad similar a la del Ministerio de Economía y la Secretaría General de la Presidencia (Segpres) hoy con los denominados informes de impacto regulatorio.

Remover barreras

Una cuarta función que tendrá a cargo la agencia será el entregar recomendaciones sobre problemas públicos y de productividad.

¿Qué significa esto? Que se faculta al nuevo organismo para evaluar y formular recomendaciones sobre políticas públicas, abordando obstáculos regulatorios y de gestión que afecten la productividad, el crecimiento económico y el bienestar social.

Otra facultad es que la agencia emitirá un Informe Anual de Productividad, que se dará a conocer anualmente basado en los procesos de evaluación y los demás estudios e informes que realice la agencia.

Las otras facultades serán la creación de planes de mejora para que las entidades implementen las recomendaciones de la agencia en los procesos de evaluación; y entregar al Presidente de la República un Informe Anual de Desempeño.

Las cifras detrás

La nueva agencia tendrá un gobierno corporativo colegiado, a través de un Consejo Superior integrado por cinco consejeros que durarán cinco años en sus cargos -pudiendo ser renovados en una sola ocasión-, siendo designados por el Presidente de la República previo concurso en Alta Dirección Pública (ADP).

Uno de los consejeros será el presidente o presidenta del consejo, actuando y siendo remunerado como jefe de servicio con jornada completa y dedicación exclusiva.

También se busca que el funcionamiento de la agencia sea autónomo del ciclo político.

Una diferencia respecto a la actual CNEP, es que los consejeros serán remunerados: percibirán una dieta de 12 UF ($ 447.252) por sesión, con un tope de 312 UF ($ 11,6 millones) por semestre.

Otro cambio relevante es que se rebustece la institución, ya que en la actualidad la CNEP cuenta con una dotación de 18 personas, la que se aumentará a 39 en la nueva agencia gracias al traspaso de funcionarios desde la CNEP y la Dipres. Esto, además de los cuatro consejeros y el titular del Consejo Superior.

De esta forma, el presupuesto en régimen de la nueva institución ascenderá a casi $ 3.000 millones.