Ahora también se plantea evitar proyectos en ubicaciones costeras o con riesgo de inundación, justo luego de los socavones que afectaron a edificaciones en Viña del Mar y Concón.
El catálogo de potenciales riesgos a los que están enfrentadas inmobiliarias y constructoras crece trimestre a trimestre, según se desprende de los reportes entregados por las empresas al regulador. Al alza en los precios de los insumos y la toma de terrenos, ahora las compañías sumaron los cambios en los planes reguladores, la seguridad jurídica y la permisología, este último vinculado a procesos burocráticos para obtener los permisos que acreditan el desarrollo de un proceso de inversión.
Pero no es todo. También se plantea como riesgo los efectos del cambio climático y la elección del terreno para el desarrollo de un proyecto, justo luego de los socavones que afectaron a edificaciones en Viña del Mar y Concón.
‘Efectos asociados con el cambio climático también podrían impactar el desarrollo de nuestros proyectos, especialmente en temas relacionados con restricciones hídricas y energéticas. La estrategia de desarrollo de proyectos de Paz Corp se enfoca en ubicaciones urbanas con acceso a factibilidades de agua y de electricidad. A su vez, no desarrollamos proyectos en ubicaciones costeras o con riesgo de inundación, las cuales a futuro podrían ser afectadas por los efectos del cambio climático’, dijo la administración del grupo en su estado de resultados al segundo trimestre del año.
Salfacorp explicó que, en el ámbito inmobiliario, los planes reguladores afectan el desempeño del sector incidiendo directamente en la edificación habitacional y comercial. ‘Es así como una de las variables clave a considerar en el negocio inmobiliario son los terrenos donde se van a llevar a cabo los proyectos; por lo tanto, los cambios en los planes reguladores pueden afectar la inversión y por lo mismo constituir un riesgo a tener presente por los operadores inmobiliarios’, sostuvo.
Añadió que cambios en las políticas y estrategias gubernamentales, ajustes a los programas y presupuestos de fomento de la vivienda, utilización por parte de las autoridades de nuevas disposiciones relacionadas con el desarrollo o promoción del sector y, modificaciones en las políticas tributarias relacionadas con las casas podrían afectar la operación de la compañía o a los compradores finales de éstas.
‘Por último, el régimen impositivo en los países donde opera SalfaCorp podrían cambiar, afectando la capacidad de generación de flujo de efectivo de la compañía. Estas variables se perciben bastante estables para el mercado en general producto de que hay coherencia en las políticas públicas en el largo plazo’, aseguró.
No obstante, la administración de Socovesa dijo que los gobiernos de turno y los cambios que periódicamente propician algunos alcaldes generan incertidumbre producto de posibles modificaciones de los planes reguladores y otras variables que afectan a la industria de la construcción.
Aumento de costo
Dado esto, la empresa dijo que pone especial cuidado en comprar los terrenos para construcciones en altura con un anteproyecto municipal aprobado, lo que permite -aseguró- tener un tiempo adecuado para la aprobación del permiso de construcción definitivo.
‘En el último tiempo se ha observado la aparición de proyectos de ley e intervenciones de orden económico y tributario que han impactado o tendrán impactos, negativos algunos y positivos otros, sobre la empresa. Algunos de ellos ya están implementados, como la sobretasa de contribuciones de bienes raíces, las modificaciones a las exenciones tributarias como el CEEC, la eliminación del beneficio tributario a las viviendas DFL-2, entre otras, contenidas en la última propuesta de reforma tributaria. Independientemente de si las propuestas prosperarán o no, es importante destacar que la empresa está constantemente evaluando el impacto de los cambios legislativos y regulatorios que la pudiesen afectar’, dijo Socovesa y añadió que ‘otro tema que ha estado muy debatido en el último tiempo es el de la permisología en la industria y su impacto en el aumento de costo de las viviendas’.
La administración de Ingevec fue categórica: ‘Últimamente se ha visto cuestionada la seguridad jurídica de los permisos de edificación’.
La compañía aseguró que, durante los últimos años, ha visto mayor dificultad para adquirir terrenos, lo que atribuyó a una menor oferta disponible y dificultades en la obtención de permisos, así como una menor accesibilidad a financiamiento por parte de las instituciones bancarias.
‘Por el lado inmobiliario, una desaceleración y dificultades de acceso al crédito implica menores ritmos de venta en segmentos tradicionales y mayores desistimientos; sin embargo, la sociedad desarrolla proyectos inmobiliarios de segmentos emergentes, los cuales, al contar con subsidios estatales, tienen un carácter contra cíclico’, dijo la compañía.