De acuerdo a datos de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) en 2022 la oferta de viviendas en la Región Metropolitana alcanzó una cifra cercana a las 65 mil unidades disponibles. De ese total, 60 mil corresponde a departamentos. Mientras, las expectativas de los consumidores por adquirir una vivienda han ido a la baja, aumentando de esa forma los desistimientos o la postergación de la compra.
-Factores como el retroceso en las ventas, el ingreso de nuevos proyectos y/o etapas y un importante nivel de desistimientos registrado durante el 2022 son los que, entre otros, han llevado a que actualmente haya una oferta de viviendas superior al 30% de lo que se considera un año normal. Si bien desde la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) y distintas consultoras inmobiliarias descartan un sobrestock y aseguran que prontamente los niveles de oferta comenzarán a bajar, las expectativas de los consumidores por comprar una vivienda estarían contrayéndose. Esto, entre otras razones, por el panorama económico actual, las altas tasas de interés y los elevados precios.
Según cifras de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), en 2022 la oferta de viviendas en la Región Metropolitana alcanzó una cifra cercana a las 65.000 unidades disponibles, lo que significa un aumento de 12% respecto del 2021. La mayor parte de ese crecimiento se debe al segmento de departamentos, con una oferta que ronda las 60.000 unidades, esto es un incremento anual de 13%.
Caso distinto se da en el mercado de las casas. Si bien la oferta avanzó 5% el año pasado, se encuentra muy rezagada en comparación con sus promedios históricos: 4.700 unidades disponibles en 2022 versus 7.000 unidades promedio entre 2011 y 2019.
Con todo, «hay que destacar que son niveles altos de oferta, ya que su distribución según estado de obra ha estado muy equilibrada: 30% pronta entrega, 50% en verde y 20% en blanco aproximadamente durante este año», señaló Nicolás León, gerente de estudios de la CChC.
De acuerdo a León, las 65 mil unidades que están disponibles están un 30% por sobre el promedio de la oferta observada en la última década, y un 38% por sobre lo que se podría considerar un año normal, «por lo tanto, nos encontramos frente a una situación inusual, no obstante, al hacer doble click en dicha oferta acumulada, vemos una buena distribución en las etapas del proceso constructivo en la que se encuentran los proyectos ofertados».
Si bien la oferta es alta, el gerente de estudios de la Cámara asegura que 1 de cada 4 viviendas disponible en oferta está en proceso de obra gruesa, cerca del 20% en etapas iniciales del proceso de construcción y otro 20% en proyectos de venta en blanco; «por lo tanto, esto se podría definir como una distribución «sana» del stock de oferta».
Por su parte, Matías Bucci, jefe del área de estudios de Colliers, concuerda con la Cámara en que efectivamente el stock disponible se encuentra por sobre a lo observado en años anteriores. Dice que durante el 2020 se generó un fuerte aumento del stock producto de la pandemia, aumentando en cerca de 140% desde el 2019 a ese año.
«Pese a esto, en los años 2021 y 2022 este stock ha disminuido lentamente producto de la venta de los mismos departamentos y dado la caída de ingresos de permisos de edificación, con lo cual ha disminuido el ingreso de nuevos proyectos en venta», agregó.
Actualmente, según cifras de la consultora, en 2022 el stock promedio de departamentos era de 43.784 y las unidades vendidas fueron 14.600. En cambio, en 2021 el stock fue de 45.853 y las unidades vendidas fueron 23.511. En ese sentido, las cifras de ventas del año pasado se asemejan a las del 2020, en plena pandemia, y aún así fueron menores en porcentaje.
Como proyección, el gerente de estudios de Colliers asegura que durante el primer semestre del 2023 se espera que el ingreso de nuevos permisos de edificación mantenga su tendencia a la baja, y con ello el stock disponible de viviendas debería disminuir, pero lentamente.
Lo anterior «hasta que la situación económica e inflación se estabilice, lo cual podría mejorar las condiciones para adquirir un crédito hipotecario junto con una disminución en la tasa de interés, lo que debería entregar mayor dinamismo a este mercado, aumentando la velocidad de venta de las viviendas, y generando una aceleración en la disminución del stock disponible actual», dice.
Por su parte, Claudia Sepúlveda, subgerenta inmobiliaria de GPS Property, asegura que la oferta de viviendas se encuentra en rangos históricos, lo cual afirma que se ve como tendencia desde el segundo trimestre del año 2021, debido a factores como el retroceso en las ventas, el ingreso de nuevos proyectos y/o etapas, y también debido al importante nivel de desistimientos registrado durante el año 2022 que alcanzó niveles de entre el 20% y 30%.
«Ahora bien, se debe precisar que el mayor nivel de oferta disponible está asociado al segmento de departamentos, que representa en torno al 90%, y es precisamente ahí donde se han alcanzado los máximos históricos, ya que en el segmento de casas los niveles de oferta han presentado una tendencia a la baja desde hace más de una década debido a la menor oferta relativa de suelo para el desarrollo de vivienda en extensión», agrega.
Con respecto a la velocidad de la venta de viviendas, Sepúlveda dice que en 2022 se dio una significativa contracción, con una caída en ventas anual en torno al 20% – 60%, dependiendo del segmento.
Los segmentos que han tenido un relativo mejor comportamiento fueron los mercados más consolidados con mayor volumen de demanda, dice Sepúlveda, como los departamentos entre UF 2.500 a UF 3.500. «Y son precisamente esos los mercados que en general están explorando los distintos agentes inmobiliarios, con miras a disminuir su exposición hacia los segmentos de mayores precios que han visto muy afectada su venta en los últimos semestres».
Además, la ejecutiva de GPS afirma que actualmente existe un backlog (reserva) importante de terrenos distribuidos entre los distintos agentes inmobiliarios que no ha podido materializarse en «proyectos en desarrollo y comercialización». Esto, lo explica por «las significativas alzas en los costos de construcción y las restrictivas condiciones crediticias que han impactado tanto a la demanda como a la oferta, situación que es particularmente relevante en los segmentos de mayor precio de viviendas ya que poseen demandas más acotadas».
Pese a lo anterior, dentro del contexto de oferta en niveles históricamente altos y con ventas que han caído en forma significativa, y que además desde GPS proyectan similares o algo superiores para el año 2023 en una perspectiva económica de desaceleración para el país, «no se deberían generar condiciones propicias para la entrada de una cantidad significativa de nuevos proyectos, particularmente en los segmentos de mayores precios sobre las UF 9.000, con lo que no debería aumentar en forma relevante la oferta disponible, y con ello un eventual sobrestock», plantea Sepúlveda.
Mientras ocurre esta inusual alta oferta de viviendas -en particular de departamentos- se ha dado además otro fenómeno que actuaría como tope: una contracción en las expectativas de las personas para la compra de una vivienda.
Así lo reflejó un estudio de Enlace Inmobiliario realizado durante el último trimestre del 2022, sobre expectativas y percepciones del mercado inmobiliario, el cual evidenció que los factores económicos que marcan la tendencia estructural -inflación, tasa de interés y baja en el ahorro-, habrían agudizado las dificultades percibidas por quienes quieren comprar una vivienda.
Los datos recabados por la empresa mediante una encuesta muestran que para septiembre del año pasado un 70% de los consultados estaba cotizando una propiedad versus el 59% que lo hizo en diciembre. Además, el número de personas que postergó o desistió de la compra bajó en un 6%.
Al ser consultados por los motivos de desistimiento en la compra de una propiedad, un 53% señaló que es debido a la situación económica nacional. Le sigue un 44% que afirmó que prefiere esperar a que bajen las tasas de interés y un 40% que prefiere esperar a que las viviendas bajen de precio.
Más atrás, un 26% de los encuestados asegura que no comprará una vivienda ya que no le alcanza para ahorrar para el pie y un 16% dice que bajaron sus ingresos. Entre otros motivos se encuentran la pérdida del empleo y un cambio en las condiciones del crédito que tenían aprobado.
Así, los datos de la empresa muestran que la cotización y búsqueda se ve disminuida, mientras el desistimiento aumenta.
Por otra parte, el estudio también analizó a las personas que sí comprarán una vivienda, pero que por distintos motivos postergaron su decisión. La mayor parte (55%) lo hizo porque considera los precios de las viviendas muy altos. El 48%, en tanto, piensa que las tasas de interés siguen muy altas y el 44% postergó la compra por la inflación y el alto costo de la vida.
Más atrás le sigue un 34% que postergó la compra ya que su renta no le alcanza para pagar un crédito hipotecario. Entre las otras razones se encuentran: requisitos de los bancos «muy exigentes», no haber podido ahorrar para el pie y temor a perder el trabajo.
Entre los que aplazarán la compra de su vivienda, un 39% lo hará hasta el 2024 y un 24% al año siguiente. Al igual que entre los que comprarán en 2023, la percepción respecto al momento que está pasando la industria determina la proximidad de la compra.
Con todo, de todas formas «la proyección a futuro muestra una disminución en la percepción de dificultad para acceder a un crédito hipotecario en los próximos 12 meses (45%), junto con una disminución progresiva en la percepción de alza de precio de las viviendas (53%)», explica Sergio Barros, director ejecutivo de Enlace Inmobiliario.
Sobre el proyecto de fondo de garantía estatal del 10% que está impulsando el Ejecutivo para el pie de la vivienda, de acuerdo al estudio de Enlace Inmobiliario, tan sólo el 18% de los encuestados indica que lo conoce y, de ese número, el 27% sostiene que la iniciativa será de mucha ayuda.
Además, un 60% indicó tener un ahorro menor al 20% exigido por los bancos. En cuanto a la expectativa para cumplir con el ahorro necesario para solicitar un crédito, un 30% señaló que espera hacerlo en hasta 6 meses y un 32% indicó que lo haría entre 6 y 12 meses.
«Ahorros propios son la principal fuente de financiamiento del pie (77%), no obstante los bonos/subsidios y los créditos de consumo aparecen como una alternativa que se estaría considerando y que podrían ser complementaria al ahorro», sostiene Barros.
Para la ejecutiva de GPS Property, en la medida que se reactiven las condiciones de demanda y oferta, particularmente asociados a los segmentos beneficiados con el proyecto de garantías especiales, «tanto por el lado de las empresas como de los beneficiarios personas naturales -viviendas de hasta UF 4.500-, esos segmentos deberían mejorar su comportamiento global, permitiendo el ingreso de nuevos proyectos y apoyando la venta de las viviendas en oferta, lo cual también contribuiría a disminuir el riesgo de un sobrestock de viviendas, al menos en los segmentos mencionados».
Mes: febrero 2023
Mayor inflación golpea al mercado de renta fija, pero impulsaría al peso
“Luego de la sorpresa, el mercado comenzó un rápido ajuste”, dice Martina Ogaz, economista de EuroAmerica. La renta fija sintió el golpe.
Las tasas de los bonos de Tesorería subieron, lo que en ese mercado significa pérdidas de capital, con los papeles a dos años en pesos pasando de 6,83% a 6,94%. “Registraron alzas principalmente en la parte corta de la curva nominal, aunque con movimientos acotados ante la menor liquidez local”, dice Ogaz. “Mientras que las tasas swaps (a las que se exponen principalmente los extranjeros) subieron de forma importante, con aumentos en promedio de 20 puntos básicos en casi toda la curva”. Esto, además, con un cambio en las expectativas implícitas para el ajuste de la TPM: ahora proyectan para junio, y no agosto, una baja de 100 puntos básicos desde el 11,25% actual.
Estos ajustes pueden llevar a cambios en las posiciones en el mercado de renta fija. “Con este IPC, aumenta la probabilidad de que el Banco Central no comience el ciclo de normalización en abril, sino más bien en mayo o incluso junio”, dice Samuel Carrasco, economista senior de Credicorp Capital. “El mercado podría volver a posicionarse en UF a corta duración, a la espera de nuevas sorpresas inflacionarias”.
Para algunos se abre una oportunidad. “Que la TPM tarde un poco más en retroceder de lo que el mercado tenía incorporado, llevaría a una corrección a la baja en los precios en el muy corto plazo, lo cual generaría un punto de entrada interesante a este tipo de instrumentos, dado que los devengos continuarían elevados”, dice Natalia Aránguiz, socia y gerente de Estudios de Aurea Group.
Barrera de los $800
El efecto del sorpresivo IPC en el precio del dólar, por su parte, no es tan claro. El cambio en la percepción de cuándo será el primer recorte de la TPM “muy probablemente reafirmará el tipo de cambio bajo los $800”, cree Ogaz.“No descartamos que en el corto plazo vuelva a buscar niveles cercanos a los $780”.
Otros creen que el ajuste ya se hizo. “No afecta el escenario, ya lo había anticipado el Banco Central”, dice Fernando Montalva, gestor de Acciona Capital.
Aránguiz advierte que cualquier efecto será de corto plazo. “Para el tipo de cambio influyen numerosas variables, las cuales continúan arrojando un precio superior a $800”, dice. Y agrega un riesgo que podría dispararlo: que se reactive la discusión de un nuevo retiro de fondos de pensiones.
BofA prevé leve superávit para el cobre en 2023 y proyecta precio en US$ 4,54
Además, commodities como el oro, la plata y el aluminio se verán beneficiados.
En lo que va de 2023, el precio del cobre ha subido 5,66%, en US$ 4,02 la libra. Si bien las últimas jornadas ha mostrado cierta debilidad por la fortaleza del dólar, a nivel internacional BofA prevé que el metal seguirá escalando de la mano de otros commodities, como el oro y la plata.
‘La mayoría de los commodities minables han subido en lo que va de año, con los precios del cobre y el aluminio teniendo el enero más fuerte en mucho tiempo. Esto contrasta con el sombrío contexto macroeconómico: China está en transición a través de la ola de Covid-19 en desarrollo después de abrir su economía, mientras que la actividad en Europa y EEUU se está desacelerando’, indicó el banco.
En línea con aquello, BofA destacó que el repunte de la demanda del metal rojo dependerá en gran medida de cuán efectivas sean las autoridades chinas al momento de abrir la economía después de que la ola de Covid-19 llegue a su fin.
‘Si bien existe evidencia anecdótica de que el brote está alcanzando su punto máximo (no hay datos oficiales), el mayor impacto en la actividad probablemente se producirá más cerca del segundo trimestre. Dado que los precios ya subieron anticipadamente, vemos margen para otra etapa al alza, una vez que la demanda física se active’, explicó BofA.
Precios objetivos
En base al escenario actual, BofA reforzó su pronóstico promedio para el cobre de US$ 4,54 la libra hacia el cuarto trimestre de 2023, mientras que para 2024, el precio objetivo se sitúa en US$ 4,48 la libra.
La mirada más alcista de la firma también se expande hacia otros commodities como el oro, plata y aluminio que podrían verse beneficiados ante una mayor demanda, mientras que en el lado pesimista se sitúa el hierro que experimentaría un mayor aumento de oferta.
Entre los principales incentivos que llevarían al precio del cobre a subir aún más durante el año está que si bien la demanda de China ha sido irregular, podría ser mucho más equilibrada en 2023.
Por otro lado, aun cuando indicaron que ‘la oferta es decepcionante’, las adiciones se están acelerando, lo que empujaría al mercado a un leve superávit para 2023, apoyado por bajos niveles de inventarios, lo que si bien es un apoyo, también podría aumentar la volatilidad.
‘Los metales tomarán otro tramo más alto a medida que China se abra de manera efectiva. Esto puede estar más cerca del verano’, añadió BofA en su reporte.
Sotheby’s ve en Vitacura el nuevo polo para oficinas del sector oriente
Actualmente, de acuerdo a un reporte de Sotheby’s, nuevamente las oficinas se encuentran con un punto de tope: las zonas que tradicionalmente albergan espacios de trabajo, -como Nueva Las Condes o El Golf-, se encuentran con alta ocupación, lo que ha obligado a las empresas a buscar otros espacios.
«Muchos están buscando locaciones más desahogadas para instalarse, lugares donde puedas salir a la hora de almuerzo y no toparte con una ola de gente. La tranquilidad del entorno es un valor cada vez más apreciado por estudios de abogados, family office y empresas con un estilo de atención más boutique», explica Felipe González, managing director de Chile Sotheby’s International Realty (Chile SIR).
Según lo recabado por la firma, la búsqueda de este perfil de organizaciones se ha enfocado específicamente en la comuna de Vitacura, sobre todo en los sectores de Nueva Costanera y Alonso de Córdova, que próximamente contarán con una estación de Metro de la nueva Línea 7. Sobre esto, el ejecutivo asegura que en el último trimestre «hemos visto que desde que partieron las obras físicas de trabajo de la línea 7 el aumento de los llamados para buscar oficinas en el sector han aumentado bastante».
«Este sector de Vitacura tradicionalmente es un sector más residencial y en el último tiempo han venido haciéndose más oficinas, pero no es un polo como Nueva Las Condes o el barrio El Golf», dice González y añade que esos polos durante la pandemia se vieron afectados y aumentó considerablemente la vacancia, pero Vitacura, si bien fue afectado, hoy en día ya está recuperado «porque nos damos cuenta de que este barrio es menos denso: no tienes tacos para entrar y salir, tienes buena conexión y tienes buen sector gastronómico. Entonces hemos visto harta demanda, pero no es todavía un sector muy consolidado de oficinas».
Además, el formato de preferencia que han constatado son los espacios de menos de 200 m2. De acuerdo al ejecutivo, las organizaciones han cambiado sus necesidades: las grandes superficies ya no son tan valoradas y las oficinas están siendo reestructuradas, producto del trabajo híbrido entre presencialidad y home office. Por lo mismo, ahora se estaría valorando más la versatilidad de los espacios.
El ejecutivo de Sotheby’s Chile señala además que los valores de arriendo promedio en la zona han crecido de un 0,5 a un 0,8 UF/m2 en los últimos tres años; incremento que el experto atribuye al alza generalizada de los precios, pero también al mayor interés que se ha generado por el sector.
Sobre el tipo de empresas u organizaciones que han mostrado interés por tener sus oficinas en la comuna de Vitacura, el managing director de Sotheby’s Chile asegura que, en general, han sido family offices, estudios de abogados y estudios de arquitectura.
Para este año, González proyecta que Vitacura tendrá un proceso de consolidación como nuevo polo de oficinas, pero nunca llegará a los niveles de densidad de Nueva Las Condes o El Golf. «No es el perfil de la comuna y tampoco el plano regulador lo permite», concluye.
Parque industrial cercano al aeropuerto de Santiago alista su ingreso al mercado con lotes desde 5 mil m2
Así lo explica Lorena Tapia, directora ejecutiva de la firma de asesoría inmobiliaria, GPS Property, quien sostiene que a partir del mes de junio de este año debiera ingresar esta nueva superficie al mercado con lotes desde 5 mil m2 hasta 80 mil m2, y que, sin duda, permitirá consolidar al sector empresarial poniente de la Región Metropolitana.
‘Hace mucho tiempo que no se desarrollaban parques industriales que tuvieran, por ejemplo, todo el cableado eléctrico bajo tierra. Entonces, efectivamente le da un carácter de muy buen nivel y además es un plus para la comuna’, menciona. Destaca la conexión directa del terreno con las Autopista Costanera Sur y Costanera Norte, además de su cercanía con el Aeropuerto de Santiago que, a juicio de la ejecutiva, convierten esta ubicación en un lugar ‘estratégico desde el punto de vista logístico’.
El terreno pertenece a la familia Guzmán Riesco y colinda con el Parque Empresarial ENEA y ya cuenta con dos empresas dedicadas a la renta de automóviles interesadas en ingresar al parque industrial.
La primera etapa del proyecto contempla el ingreso de 13 hectáreas al mercado con lotes cercanos a los 5 mil m2. Mientras que las restantes 27 hectáreas deberían iniciar su proceso de compraventa en un plazo de cuatro años. ‘Va a depender mucho de la velocidad de colocación y también todo lo que involucra la tramitología’, dice Tapia.
Sin embargo, desde GPS Property tienen altas expectativas en cuanto a esta superficie, pues dicen que si bien aún existe cierta inestabilidad en la economía, creen que la demanda por terrenos industriales continuará al alza y seguirá la misma senda, ya sea por usuarios finales o por desarrolladores de bodegas.
Los precios
‘Esta oferta va a generar una mayor competencia en el mercado. Como no hay disponibilidad, obviamente los precios han estado al alza constantemente, pero al ingresar esta superficie al mercado existe una mayor oferta y no está todo concentrado en los pocos terrenos disponibles que quedan’, explica Lorena Tapia.
De acuerdo a cifras de GPS Property, el 70% del mercado industrial está concentrado en el sector poniente de la Región Metropolitana. El bajo desarrollo de proyectos ha impulsado un crecimiento importante en los precios de arriendo y compra de estos activos,lo que, probablemente, se mantendrán durante este año.
‘Si uno mira el sector de Vespucio entre la Ruta 68 y la Costanera Norte, en todo el sector en torno al aeropuerto quedan muy pocos terrenos, la mayoría está en manos del proyecto de ENEA (…) Hoy día existe una muy baja disponibilidad de terrenos de 4 mil m2 y los precios están en torno a UF 8 por m2’, comenta la directora ejecutiva de la firma.
Actualmente, el mercado de bodegas cuenta con tasas de vacancia de menos del 0,5%, de manera que la fluctuación de los valores va a depender del panorama económico, pero también del eventual inicio de futuros proyectos en otras zonas de la Región Metropolitana, como el sector sur, y que ayuden a descongestionar comunas como Quilicura y Pudahuel.
Visan reorganización de Sencorp: Senerman tiene seis meses para encontrar socio que inyecte US$ 36 millones
A fines de septiembre del año pasado, el conglomerado abrió dos procesos de reorganización judicial: Sencorp SpA e Inversiones y Rentas Sendero SpA, que se aprobó la semana pasada. La deuda total supera los $227 mil millones. De estos, $178 mil millones son de su negocio de inversiones y rentas, con Banco del Estado, BCI, Internacional y Scotia entre sus acreedores. Los otros $49 mil millones son de la unidad de inversión en proyectos de desarrollo inmobiliario y entre sus prestamistas figuran Banco Consorcio, Tanner y Logros Servicios Financieros.
Al iniciar su propuesta de reestructuración judicial, el grupo sostuvo que está ‘eligiendo salir adelante y ser responsables con los trabajadores, proveedores, acreedores, clientes y socios estratégicos’, y que, dada las circunstancias, la reorganización es ‘la mejor decisión porque son viables, tienen excelentes activos y proyectos de valor en desarrollo que les permiten seguir funcionando y proyectar la empresa por muchos años más’.
Según el acta de la junta de acreedores de Sencorp, el veedor, Patricio Jamarne, sostuvo: ‘Es un acuerdo viable en la medida que se cumpla con los flujos que se han propuesto’. Agregó que, ‘si se procediera a una liquidación los acreedores directos no tendrían ningún tipo de recuperación, y los acreedores que tienen garantías de terceros podrían ver satisfechos solo en parte sus créditos, por lo cual, a su juicio, es una mucho mejor opción la aprobación del ARJ’.
Lo que viene
A partir de ahora, el clan Senerman tiene seis meses para buscar un socio que inyecte recursos frescos por unos US$ 36 millones. En caso de no lograrlo, o que no se hubiere firmado dentro de ese plazo un compromiso vinculante que se materialice dentro de los tres meses siguientes, y una vez vencidos dichos plazos, sin necesidad de resolución alguna, se comenzará un proceso de venta ordenada de los activos.
‘Durante el plazo de 6 meses, contados desde la junta deliberativa, Sencorp SpA realizará gestiones para la búsqueda de un socio o inversionista que haga un aporte de, a lo menos, UF 800.000 mediante la forma de compra de acciones, aumento de capital, mezzanine u otro mecanismo adecuado al efecto, con el objeto de financiar el desarrollo de proyectos y pagar los créditos afectos al presente acuerdo’, dice la propuesta aprobada.
Añade que una vez amortizados íntegramente los recursos y su tasa interna de retorno, el financista tendrá el 30% de los derechos económicos de Sencorp a perpetuidad, sin perjuicio de que los actuales accionistas puedan adquirir esos derechos.
El acuerdo contempla que, para efectos de solventar el primer año de operación, Sencorp buscará una línea de crédito por 80 mil UF, en condiciones de mercado. Esta deberá reintegrarse dentro de un año de la aprobación del acuerdo y tendrá preferencia de pago respecto de todos los créditos a los que afecta la reestructuración financiera.
En el caso del acuerdo de reorganización de Sendero, esta sociedad podrá contratar un crédito mediante una línea rotativa para financiar capital de trabajo, por un máximo de 500 mil UF.
Considera también la venta de activos prescindibles, entre ellos la oficina 2401 del edificio Torre de la Costanera, de cuatro niveles, más estacionamientos y bodegas. También figura un local, estacionamientos y bodegas en El Bosque 500 y una serie de oficinas y aparcaderos en los edificios de La Industria, Millenium, Pacífico y Torre Vitacura. Se suman cinco terrenos: Camino Internacional (Viña del Mar), Carmen Silva (Providencia), Pablo Urzúa (Independencia) y Av. Paseo Pie Andino (Lo Barnechea) y Lo Aguirre (Pudahuel).
Grupo Sencorp lleva casi 6 décadas desarrollando soluciones inmobiliarias. Fundado en 1962 por Abraham Senerman, actualmente abocado a su oficina ASL Arquitectos, hoy es controlado mayoritariamente por su hijo Ricardo. Con 3,5 millones de metros cuadrados construidos, tiene entre sus hitos el desarrollo del barrio financiero de Santiago.
El precio del dólar rebota $11,70 y supera la barrera de los $800
Con esto, los principales índices de Wall Street cerraron en rojo este lunes, por lo que los inversionistas buscaron refugio en el dólar. Un efecto que llegó hasta Chile.
El billete verde, que había caído de la barrera de los $800 la semana pasada, se recuperó este lunes. Esto, con un salto de $11,7, hasta los $805,7. Un rebote que dependerá de varios factores si continúa, advierten analistas.
Las razones para el salto de este lunes son claras. “El cambio de tendencia que ha registrado la paridad local estas últimas jornadas se explica principalmente por el escenario externo, el cual comenzó a deteriorarse luego de la publicación del informe de empleo en EE.UU.”, dice Martina Ogaz, economista de EuroAmerica.
Esto, además, con tensiones geopolíticas altas, luego de que EE.UU. derribó el sábado un presunto globo espía chino sobre el océano Atlántico.
Con estos factores, para Ogaz, la tendencia al alza seguirá. “Esperamos niveles algo más elevados, con proyecciones en $820 a un mes y $830 a tres meses”, dice.
Para otros, que se consolide el alza dependerá de varios factores y, como ha sido la tónica en los últimos meses, del ambiente externo. “Técnicamente, el dólar continúa en un canal bajista de corto plazo, aunque registró un fuerte rebote”, dice Joaquín Spörke, gerente de Productos Transaccionales de BTG PactualWealth Management. “La clave para determinar si se mantiene el rebote será el desempeño de la divisa a nivel global”. El dollarindex, que compara al billete verde con una canasta de monedas, subió el lunes 0,73%, hasta los 103,502.
Si bien Spörke admite que el IPC de enero de Chile, que se conocerá este miércoles, podría tener un impacto, cree que “en el corto plazo el efecto externo será mayor”. Y nuevas señales del mercado laboral de EE.UU. serían clave. “De todas maneras, a diferencia del año pasado, este rebote probablemente no signifique un cambio de tendencia en el mediano plazo para el dólar”, estima.
Para Fernando Montalva, estratega de Acciona Capital, la clave para saber si se seguirá apreciando el billete verde será la diferencia entre los movimientos del Banco Central y la Fed, “que están en etapas distintas”. Es decir, mientras el Banco Central estaría pronto a comenzar sus recortes de tasas, la Fed está todavía camino a encontrar su tasa máxima. “Uno podría esperar que el diferencial de tasa entre Chile y EE.UU. se cierre, lo que afecta negativamente al peso (pro dólar)”, explica.
Montalva cree que el dólar encontró un soporte en la zona de entre $780 y $800.
Vacancia de strip center baja a 5,6% en segunda mitad de 2022
Al cierre del segundo semestre de 2022, la tasa de vacancia se ubicó en 5,6%, cayendo 0,2 puntos porcentuales respecto de la primera mitad del año pasado. Con ello, bajó 1,2 puntos porcentuales desde su peak de 6,8% alcanzado en el primer semestre de 2021, tras los efectos de la pandemia.
“Observamos que el mercado ha empezado a repuntar, lo que también se vio en que la última actualización de tasa de descuento bajó”, dijo Fernando Márquez de la Plata, subgerente de Estudio de Colliers. “El mayor factor en la baja de vacancia para el mercado de strip center se inició el segundo semestre de 2021 como resultado de la liberación de restricciones pospandemia, lo cual se extendió todo el 2022”, apuntó.
“Consideramos que el 5,6% sería una tasa de vacancia sana de mercado, sin embargo todavía superior al 3% y 4% registrado en periodos prepandémicos, por lo que se espera que durante el 2023 la tasa debiese continuar con una tendencia a la baja”, sostuvo.
Ingresaron dos nuevos recintos al mercado
El resultado al cierre de 2022 reflejó una reversión a la tendencia al alza en los niveles de vacancia que se observaban en el mercado desde 2018, llegando a los cerca de 13.000 metros cuadrados disponibles actualmente, señaló la firma.
En la segunda mitad de 2022, además, se registró el ingreso de dos strip center, lo que en conjunto suman cerca de 4.500 metros cuadrados nuevos.
El inventario total de la oferta en el Gran Santiago alcanzó los 236.215 metros cuadrados, con la zona nororiente manteniéndose como la zona más importante en la capital, con una participación de mercado de 30,7%, seguido de la zona norte con un 20,5%. Las zonas sur-poniente y centro registraron una participación de 17,4% y 16,9 % respectivamente, con leves variaciones respecto del periodo anterior.
En cuanto a los precios promedio de arriendo, el reporte indicó que al segundo semestre del año pasado se registró un leve incremento en los valores. “Se evidencia un alza en los valores del primer piso de 0,04 UF por metro cuadrado y una baja de 0,01 UF por metro cuadrado para el segundo piso”, señaló el informe.
En la zona nororiente alcanzó el valor más elevado en primer piso, con un precio promedio de 0,85 UF por metro cuadrado, mientras que el promedio en segundo piso se mantiene en 0,71 UF por metro cuadrado, indicó el reporte.
“Esto evidentemente muestra una reactivación del mercado, lo que creemos continuará en esta línea durante el 2023, con leves bajas en las tasas de vacancia y posibles alza en los precios de arriendo, pudiendo llegar a las 0,78 – 0,80 UF por metro cuadrado promedio de arriendo para los primeros pisos”, aseguró Márquez.
Con todo, el ejecutivo aseguró que el mercado de stripcenter continuará con un buen desempeño durante los próximos períodos.
“El mercado de strip center ha crecido a una tasa anual de 7,9% en los últimos tres años, y pese a las crisis (estallido social, pandemia), ha sido bastante resiliente. Creemos que el 2023, pese al menor crecimiento que va a tener el país, se va a mantener estable”, manifestó.
Proyección para
volver a los niveles previos a la crisis
En este contexto, el ejecutivo indicó que podrían retomarse los indicadores prepandémicos de cara al próximo año.
“Si se logra controlar la inflación, proyectamos que el 2024 se podría volver a indicadores del 2019. Esto, debido a que el comercio se reactivó tras la pandemia, especialmente en lo que se refiere a tiendas de conveniencia”, dijo. “Este tipo de comercio es bien demandado por los consumidores en gran parte debido a su ubicación estratégica y comodidad, se puede pasar a comprar de manera rápida y ofrecen variedad de comercio en una superficie bien acotada”, agregó.
SUPERFICIE
El inventario total de la oferta en el Gran Santiago alcanzó los 236.215 metros cuadrados.
Banco Central e Imacec fuerzan cambios de visiones en mercado de renta fija en Chile
Una encuesta de Bloomberg News entre 13 operadores y analistas de renta fija locales muestra que casi la mitad prevé que las tasas nominales subirán en febrero.
La sorpresiva fortaleza de la economía chilena y un Banco Central más cauteloso están provocando una vuelta en U para las apuestas de tasas de los bonos locales. Una encuesta de Bloomberg News entre 13 operadores y analistas de renta fija locales muestra que casi la mitad prevé que las tasas nominales subirán en febrero, mientras que solo uno pronosticó una caída. Es un cambio drástico en comparación a la encuesta de enero, en la cual la mayoría esperaba una baja en las tasas. La economía chilena repuntó en diciembre respecto del mes precedente gracias al crecimiento de todos los sectores excepto el minero. Esto respalda la visión del Banco Central de que aún es demasiado pronto para recortar las tasas de interés. El ministro de Hacienda, Mario Marcel, dijo que era hora de “perder el miedo” al futuro económico tras una serie de proyecciones “catastrofistas” que no se materializaron. Todo parece indicar que el Banco Central no recortará la tasa en abril. “Los datos macro muestran que estamos entrando al 2023 mejor a lo esperado y puede que el enfriamiento de la economía sea menos severo que lo que se creía”, afirma Ramón Domínguez, portfolio manager de MBI Inversiones. “La inflación podría terminar siendo más ‘sticky’ de lo esperado, lo que requiere una TPM alta por más tiempo y presionando las tasas de renta fija al alza”. Las tasas locales aumentaron la semana pasada tras bajar durante la mayor parte de enero. La tasa del BTP a 10 años subió 27 puntos base a 5,53%, mientras que la tasa del bono en UF aumentó 9 puntos a 1,82%. Principales impulsores El 54% de los encuestados dijo que el principal “driver” para las tasas locales en febrero serán los datos macroeconómicos locales, mientras que 39% está más centrado en los movimientos del Tesoro estadounidense. Solo una persona mencionó el escenario político local. Los datos macro también lideraron las encuestas de enero y diciembre. Las expectativas de una inflación persistente y una economía más robusta están reavivando las apuestas por los bonos en UF a corto plazo, según la mayoría de los operadores encuestados. Estos instrumentos habían sido los favoritos del mercado desde que comenzó la encuesta mensual en abril de 2021, pero esa preferencia cayó momentáneamente en diciembre y enero por la mayor demanda de bonos nominales a largo plazo. Un tercio de los encuestados cree que la curva nominal se empinará, mientras que el 46% apuesta por que se aplane. El 23% restante no ve cambios en la pendiente en febrero. Mariano Álvarez, gerente de renta fija de LarrainVial, es uno de los que prevé que la curva se empinará, posiblemente con subidas en las tasas de largo plazo y caídas en las más cortas. “La curva nominal aún se encuentra muy invertida, considerando que el Banco Central debería empezar la reducción de la TPM pronto”, dijo Álvarez. “Esperamos que las tasas cortas tengan un mejor desempeño que las largas. Estas últimas estarían más presionadas en febrero y en los próximos meses”.
Demanda por residencia definitiva cambia mercado de zonas lacustres
Otro aspecto importante es que los proyectos en lagos no hacen excepción en el cuadro general que enfrenta el mercado inmobiliario, de bajas ventas, altos precios y muy pocos proyectos nuevos. El ejecutivo agrega que el sector está un poco más cauto respecto a esta demanda y por el financiamiento. ‘En general, el segmento más activo es el de las viviendas con subsidio, que está teniendo un fuerte impulso desde el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu). Este segmento es menos sensible a las percepciones de los compradores y más independiente en el financiamiento’.
En este contexto, Augusto Matte Correa, consultor del Área de Estudios de Colliers, señala que para los años próximos se espera una disminución en el mercado. ‘La inflación, los altos costos de construcción y financiamiento, sumado a la incertidumbre del país, han provocado que los inversionistas y principales gestores de proyectos inmobiliarios reduzcan su exposición al mercado, por lo que el stock de viviendas disponibles irá disminuyendo’.
Para Gleisner, un cambio en la oferta será una evolución larga y lenta, en la medida que se recupere el mercado inmobiliario de los sucesivos shocks que ha sufrido. ‘Las alzas de precios se debieran explicar más por el alza de costos y los mayores costos financieros, por alza de tasas y demoras en la venta, más allá de la mucha presión de la demanda’.
NUEVOS RESIDENTES
Para mejorar su calidad de vida y la de su familia, muchos profesionales jóvenes, quienes pueden trabajar a distancia, se están instalando de forma permanente en el sur.
‘Por otro lado, ven en estas alternativas inmobiliarias una oportunidad. Dado el creciente valor de este tipo de activos y la devaluación del peso nacional, existe gente que también adquiere inmuebles como inversión para protegerse de la inflación, generar ingresos a partir de un arriendo y sumar una plusvalía en el proceso’, sostiene Augusto Matte.
Reinaldo Gleisner añade que hay un segmento de tercera edad que debiera aumentar en importancia, entre otras razones, por el crecimiento vegetativo del segmento etario, como se da en los países más desarrollados. ‘Sin embargo, por ahora es un segmento relevante, pero bastante minoritario’.