Tras negativo Imacec de marzo, la economía acumula 2 trimestres consecutivos de caída
El ministro de Hacienda, Mario Marcel, descartó que la economía esté en recesión técnica y puso acento en que las cifras muestran una recuperación trimestre a trimestre. Algunos economistas difieren de esa visión.
El complejo entorno por el que atraviesa la minería, el comercio y la industria manufacturera en el país se plasmó en una contracción interanual de la actividad económica de 2,1% en marzo, lo que superó las expectativas del mercado y dejó en evidencia el freno del consumo y la falta de inversión, según los últimos índices divulgados ayer por el Banco Central. Con la cifra del tercer mes, la economía habría caído 0,9% en el primer trimestre, un nivel más negativo que el -0,6% estimado en el último Informe de Política Monetaria (IPoM) y que se suma por segundo trimestre consecutivo a la negativa tendencia interanual de la actividad, ya que en el cuarto trimestre del año pasado se registró una contracción del 2,3%.
Así, estas cifras trimestrales calzarían en la definición convencional de una recesión, sostienen Marco Correa, economista jefe de Bice Inversiones y de Rodrigo Montero, decano de Economía de la Universidad Autónoma. Difiere de esa opinión Arturo Claro, economista de Econsult. Para ello, debería haber dos trimestres consecutivos con una contracción respecto al trimestre anterior, y ello no ha ocurrido, precisa. El economista prevé que la economía continúe ajustándose en los meses que vienen y espera que los próximos trimestres tengan una variación negativa, lo que significaría una recesión técnica en el segundo semestre de 2023. Un tema que también puso de relieve el ministro de Hacienda, Mario Marcel, durante una entrevista con radio ADN, pero desestimando una recesión. Observó que la cifra de marzo, comparada con el mes anterior tiene una caída más pequeña (-0,1%) y excluyendo la minería, hay un crecimiento respecto al mes anterior. Además, indicó que una recesión técnica se define como dos trimestres seguidos de caída en la actividad respecto al trimestre anterior y eso no está ocurriendo, asegura la autoridad.
‘Ahora tenemos la situación contraria en este trimestre, un crecimiento respecto del trimestre anterior de 1%. Si le quitamos la minería, tenemos 1,6% (…) nos estamos recuperando trimestre a trimestre, estamos en la situación opuesta a una recesión técnica’, enfatizó. Estimó que solo de mantenerse durante el resto del año el nivel de actividad de marzo o del primer trimestre, ‘vamos a tener un año sin caída en la actividad, vamos a tener un año con un pequeño crecimiento’, indicó. Marco Correa proyecta para el Imacec de abril una caída de -1% en doce meses, con variaciones negativas que se mantendrían en ese nivel hasta junio, para luego, desde julio-agosto, registrar cifras nulas e incluso positivas. Su pronóstico es que la actividad registraría este año una contracción cercana a -0,8%. Por su parte, Nathan Pincheira, economista jefe de Fynsa, estima una caída interanual de -0,5% para el Imacec de abril y un nulo crecimiento de la actividad en 2023. Montero ve probable que algunos de los próximos Imacec continúen anotando cifras en rojo y no descarta un 2º trimestre con cifras negativas. ‘Seguramente el segundo semestre podríamos volver a ver cifras positivas de Imacec y para el PIB, cerrando el año con un crecimiento en el rango estimado por el Banco Central, entre -0,5% y +0,5%’, dice.
La caída anual de -2,1% en el Imacec de marzo fue explicada principalmente por la minería, con una caída de -8,5% y comercio con -5,4%. Servicios presentó un aumento de 0,9% en doce meses, destacando el dinamismo de los servicios personales y empresariales. De acuerdo al análisis de Scotiabank Chile, la sequía, las menores leyes del mineral y la escasez de nuevos proyectos de inversión en el sector, ha profundizado la caída del PIB minero en los últimos años. Agrega que la discusión del royalty minero, que se ha prolongado en el Congreso, también es un elemento a considerar al revisar la debilidad de este sector el cual, sostiene, probablemente necesita certezas para seguir adelante con sus proyectos. El Imacec no minero acusó una disminución de -1,0% en doce meses. Para Andrés Pérez, economista jefe de Itaú, si bien el indicador de marzo fue una sorpresa negativa, por otro lado hubo un aumento en el mes de 0,2% en el Imacec no minero desestacionalizado, coherente con la visión de un ajuste gradual de la economía. Nicolás García, economista sénior de Coopeuch, proyecta para abril una caída del Imacec de -1,1%, incidida principalmente por el comercio.
En su reporte, Santander remarca que hacia delante, ‘continuaremos observando una desaceleración de la economía, asociada a un menor consumo privado, afectado por el debilitamiento del mercado laboral, el entorno financiero que se mantendrá estrecho y un contexto internacional que ha tendido a empeorar en las últimas semanas’. Sobre el segundo semestre, Correa apunta a un tema base de comparación que en el margen debería ser más positivo; ve probable que el comercio deje de caer y que, al igual que los servicios, comience a mostrar reactivación, sobre todo en el cuarto trimestre. El inicio de recortes de la tasa de interés de política monetaria (TPM), previsto para julio, debería ayudar a dar impulso a estas actividades, agrega. Al ministro Marcel, lo que más le preocupa de las últimas cifras es que ‘todavía no vemos una recuperación importante de la construcción. Eso es importante porque es inversión y genera mucho empleo’, comentó.
Fuente: El Mercurio