Fitch ve un riesgo para los bancos ante el “modesto” crecimiento económico del país
La baja demanda de crédito por parte de las empresas, producto de la incertidumbre y la poca expansión del PIB proyectada para los próximos años, repercutirá en el desempeño de las instituciones financieras.
A la reciente alerta de que es poco probable que Chile alcance su meta de déficit fiscal este año, la clasificadora Fitch Ratings ahora sumó la advertencia de que el “modesto” crecimiento económico proyectado para 2024 y los próximos dos años representa un riesgo para los principales bancos del país.
Fitch espera un alza promedio del PIB de 2,2% para el período entre 2024 y 2026. Esta proyección está en línea con las expectativas del Banco Central, que en el Informe de Política Monetaria (IPoM) de septiembre, registró un crecimiento esperado del país de entre 2,25% y 2,75% para 2024, y de entre 1,5% y 2,5% para 2025 y 2026.
Baja demanda
En este contexto, la clasificadora de riesgos espera una expansión moderada del crédito para los bancos chilenos en 2024. Otras presiones para los bancos son la baja demanda de crédito, que se ha extendido por varios meses, principalmente en préstamos comerciales e hipotecarios, y también el menor apetito de riesgo de los bancos en el entorno actual.
Nicolás Libuy, subgerente de renta variable local de Inversiones Security, explica que la menor demanda de crédito está afectada por niveles de tasas que se ubican “en la parte alta” de su historia reciente, a lo que se le suman expectativas con respecto al dinamismo local que se han mantenido contenidas. Estos dos factores han limitado una mayor demanda en segmentos relevantes para la banca, como son consumo y construcción.
“Hoy las empresas mantienen un bajo apetito por endeudarse. Existe poco ánimo de financiar nuevos proyectos en un entorno con mayor incertidumbre económica y bajo crecimiento del país”, asevera Ewald Stark, analista de BICE Inversiones.
Además, hay una oferta más restringida por parte de los bancos. Pese a que ha disminuido el costo de crédito, Stark señala que aún se espera que los bancos mantengan estándares más rigurosos en el otorgamiento de créditos debido a los altos niveles de morosidad.
Crédito comercial
En particular, Fitch resalta el comportamiento reciente del crédito comercial. Según la Asociación de Bancos (ABIF) a agosto, las colocaciones comerciales se encontraban por debajo de los niveles prepandemia, tanto para pequeñas como grandes empresas. La clasificadora afirma que la trayectoria de los préstamos comerciales debe evaluarse en el contexto de una fuerte expansión en las primeras etapas de la pandemia, seguida de la contracción que se requirió en el proceso de ajuste del gasto y convergencia de la inflación a la meta del Banco Central.
Hacia el futuro, una recuperación en el segmento de crédito comercial permitirá un mejor desempeño durante 2025 y 2026, en la medida “de que el actual ciclo electoral logre avanzar en parte de las trabas que enfrentan algunos sectores económicos, como construcción”, comenta Libuy. A este factor le suma que es “clave un mejor desempeño de la economía local”.
Sin embargo, una recuperación de las colocaciones no solo depende de los factores internos. “(Se) requiere de un escenario externo relativamente benigno, con una desaceleración suave de la economía global y riesgos geopolíticos que se desactiven en cierto grado”, afirma Libuy.
Rentabilidad
Pese a los riesgos que observa, Fitch asevera que estas preocupaciones son manejables por los bancos y que la rentabilidad seguirá respaldada por márgenes sólidos, beneficiados por la disminución del costo de financiamiento debido a la flexibilización de la política monetaria y el remanente de los ingresos indexados a la inflación.
Sobre la rentabilidad, la clasificadora de riesgos acota que los resultados de los bancos chilenos son bajos en comparación con otras instituciones financieras similares de la región, aunque las ganancias están alineadas con los niveles históricos del sistema bancario chileno.
Stark explica que la menor rentabilidad se produce porque “Chile es un mercado más maduro. También, el crecimiento del crédito en Chile ha permanecido muy rezagado por mucho tiempo. En una década, el crédito crece a una tasa anual menor al 3% real”.
Fitch espera un alza promedio del PIB de 2,2% para el período entre 2024 y 2026. Esta proyección está en línea con las expectativas del Banco Central, que en el Informe de Política Monetaria (IPoM) de septiembre, registró un crecimiento esperado del país de entre 2,25% y 2,75% para 2024, y de entre 1,5% y 2,5% para 2025 y 2026.
Baja demanda
En este contexto, la clasificadora de riesgos espera una expansión moderada del crédito para los bancos chilenos en 2024. Otras presiones para los bancos son la baja demanda de crédito, que se ha extendido por varios meses, principalmente en préstamos comerciales e hipotecarios, y también el menor apetito de riesgo de los bancos en el entorno actual.
Nicolás Libuy, subgerente de renta variable local de Inversiones Security, explica que la menor demanda de crédito está afectada por niveles de tasas que se ubican “en la parte alta” de su historia reciente, a lo que se le suman expectativas con respecto al dinamismo local que se han mantenido contenidas. Estos dos factores han limitado una mayor demanda en segmentos relevantes para la banca, como son consumo y construcción.
“Hoy las empresas mantienen un bajo apetito por endeudarse. Existe poco ánimo de financiar nuevos proyectos en un entorno con mayor incertidumbre económica y bajo crecimiento del país”, asevera Ewald Stark, analista de BICE Inversiones.
Además, hay una oferta más restringida por parte de los bancos. Pese a que ha disminuido el costo de crédito, Stark señala que aún se espera que los bancos mantengan estándares más rigurosos en el otorgamiento de créditos debido a los altos niveles de morosidad.
Crédito comercial
En particular, Fitch resalta el comportamiento reciente del crédito comercial. Según la Asociación de Bancos (ABIF) a agosto, las colocaciones comerciales se encontraban por debajo de los niveles prepandemia, tanto para pequeñas como grandes empresas. La clasificadora afirma que la trayectoria de los préstamos comerciales debe evaluarse en el contexto de una fuerte expansión en las primeras etapas de la pandemia, seguida de la contracción que se requirió en el proceso de ajuste del gasto y convergencia de la inflación a la meta del Banco Central.
Hacia el futuro, una recuperación en el segmento de crédito comercial permitirá un mejor desempeño durante 2025 y 2026, en la medida “de que el actual ciclo electoral logre avanzar en parte de las trabas que enfrentan algunos sectores económicos, como construcción”, comenta Libuy. A este factor le suma que es “clave un mejor desempeño de la economía local”.
Sin embargo, una recuperación de las colocaciones no solo depende de los factores internos. “(Se) requiere de un escenario externo relativamente benigno, con una desaceleración suave de la economía global y riesgos geopolíticos que se desactiven en cierto grado”, afirma Libuy.
Rentabilidad
Pese a los riesgos que observa, Fitch asevera que estas preocupaciones son manejables por los bancos y que la rentabilidad seguirá respaldada por márgenes sólidos, beneficiados por la disminución del costo de financiamiento debido a la flexibilización de la política monetaria y el remanente de los ingresos indexados a la inflación.
Sobre la rentabilidad, la clasificadora de riesgos acota que los resultados de los bancos chilenos son bajos en comparación con otras instituciones financieras similares de la región, aunque las ganancias están alineadas con los niveles históricos del sistema bancario chileno.
Stark explica que la menor rentabilidad se produce porque “Chile es un mercado más maduro. También, el crecimiento del crédito en Chile ha permanecido muy rezagado por mucho tiempo. En una década, el crédito crece a una tasa anual menor al 3% real”.
Fuente: El Mercurio