Alto stock acumulado de proyectos residenciales paraliza el inicio de nuevas obras
La entidad dijo que, según los últimos indicadores disponibles sobre la actividad de la industria de la construcción, el 2022 cerró con un total de 261 nuevas obras que ingresaron para ser construidas en el país, un 29% menos que el total de proyectos de 2021 y un 67% por debajo del nivel de años prepandemia.
En particular, del total de proyectos ingresados durante el año pasado, 55% fueron obras residenciales, seguido de un 45% de proyectos de infraestructura y comercial.
Isabel Pinochet, gerenta comercial de Iconstruye, sostuvo que, el año pasado, se observó una ralentización en el ingreso de obras privadas, principalmente en construcción habitacional, y, por lo mismo, en la cartera de proyectos hubo una mayor presencia de iniciativas públicas de infraestructura, como plantas industriales y bodegas.
Por otro lado, dijo que hubo una disgregación de obras en regiones, destacando la construcción de nuevas plantas de energías renovables, situación que espera se mantenga durante este año.
Respecto a las obras en ejecución a diciembre, a lo largo del país dijo que hay 1.068 proyectos activos, de los cuales el 17% está en obras previas (que considera el despeje, destronques, entre otros), 3% en cimentación, 24% en obra gruesa y un 56% en terminaciones.
‘El elevado porcentaje de obras que están en etapas finales ha aumentado el stock acumulado de obras residenciales, situación que ha paralizado el inicio de nuevos proyectos, con excepción de los proyectos de viviendas con subsidios’, agregó la ejecutiva.
En cuanto a la dispersión de obras en ejecución por regiones, la Región Metropolitana tiene la mayor cantidad de obras en desarrollo con 581 (54,4%), seguido de Valparaíso con 108 (10,1%), y Biobío con 62 proyectos (5,8%).
Del total de obras activas, un 70% de ellas corresponden a obras residenciales, un 15% a proyectos de infraestructura, seguido por un 9% de obras comerciales, que contemplan oficinas, centros comerciales, hoteles, plazas, gimnasios, centros educativos, y estadios.
Fuente: El Diario Financiero