Índice de confianza empresarial mejora levemente en enero, pero expectativas siguen en terreno pesimista
Desde la casa de estudios que participa en la confección del indicador destacaron que desde agosto de 2021 a la fecha este ha mostrado un comportamiento oscilante, pero dentro de una marcada tendencia a la baja.
El Indicador Mensual de Confianza Empresarial (IMCE) alcanzó un nivel de 37,87 puntos en enero, superior al mes pasado en 2,22 puntos, pero sigue posicionando las expectativas empresariales globales en un nivel pesimista.
Los sectores de comercio, industria y minería experimentaron ligeros aumentos con respecto al mes anterior, mientras que el rubro de la construcción registró un ligero retroceso. Todos los sectores de la economía se ubicaron en niveles pesimistas, donde 50 unidades marcan una posición neutra entre resultados positivos y negativos.
Las presiones de salarios se posicionaron en un nivel superior al neutral (60,5 puntos); las expectativas sobre empleo aumentaron respecto del mes anterior (50,4 puntos); y la producción esperada se ubicó en 38,2 puntos, superior al mes anterior en 6,8 puntos. El uso de la capacidad instalada alcanzó un 80,9% de uso, similar al mes pasado. La inflación esperada se ubicó en 8,2%, inferior al mes anterior en 1,0 unidad.
Por su parte, la demanda actual alcanzó 32,6 puntos, inferior al mes anterior en 3,0 puntos. Los inventarios se ubicaron superiores al nivel deseado alcanzando 55,2 unidades; las presiones de costos alcanzaron los 53,9 puntos; la situación general del negocio llegó a 47,3; y la apreciación general sobre la economía chilena se ubicó en un nivel de 12,8 unidades.
Pablo Pincheira Brown, profesor asociado de la Escuela de Negocios UAI, manifestó que el avance de poco más de dos unidades en enero, versus diciembre, estuvo impulsado principalmente por una importante alza en el volátil indicador de minería, que pasó desde un nivel de 38,54 puntos a uno de 46,08. ‘A pesar de esta buena noticia, el IMCE presenta un nivel actual de 37,83 puntos, aún en pleno terreno de pesimismo, disminuyendo prácticamente 16 puntos desde igual mes del año pasado. Todos los indicadores individuales (Comercio, Construcción, Industria y Minería) también pisan de lleno el terreno pesimista, con valores de 42,95; 25,42; 36,35; y 46,08 puntos respectivamente’ comentó.
El profesional destacó que desde agosto de 2021 a la fecha el IMCE ha mostrado un comportamiento oscilante, pero dentro de una marcada tendencia a la baja. ‘En estos últimos 18 meses, las alzas mensuales más importantes fueron la de enero de 2022, mes en el que el IMCE subió 6,78 puntos, y la de septiembre del 2022, cuando el índice subió 2,78 unidades. Estas alzas pueden asociarse al nombramiento del actual ministro de Hacienda (enero de 2022) y a los resultados del referéndum de septiembre de 2022. En este período, el IMCE ha tenido 6 meses de alzas y 11 meses de disminuciones’.
Por su parte, Soledad Recabarren, socia de Recabarren Asociados y miembro del Círculo Economía y Finanzas de ICARE, señaló sobre el desempeño de este mes: ‘Si bien subimos el indicador en relación con el mes pasado, seguimos en rangos muy pesimistas, y con 15,5 puntos más bajos que el índice a igual fecha el año pasado’.
Añade que en la medida que el Gobierno va mostrando signos de moderación, los indicadores se mueven en sentido positivo; por ejemplo, la minería incrementó en 7,5 puntos su índice de confianza, pese a mantenerse aún negativo. ‘Esto podría deberse a que en el royalty minero se han corregido algunos temas que generaban mucha preocupación a la industria’, explicó. ‘Las expectativas de baja del tipo de cambio, reducción de la inflación, los avances concretos en materia constitucional, sumado a la época de vacaciones, han mejorado la confianza empresarial al inicio de este año’, agregó.
En tanto, Rodrigo Aravena, economista jefe de Banco de Chile, manifestó que ‘estas cifras son reflejo del fuerte ajuste cíclico que atraviesa actualmente la economía. Algunos de los elementos que destacan del informe de enero son el hecho de que todos los sectores se encuentran persistentemente en zona pesimista, dejando entrever que el debilitamiento de la economía es transversal y, por ende, no atribuible al deterioro de algún sector en particular’.
En este contexto, dijo, constituye una señal de advertencia la sostenida caída en el sector construcción, rubro que además de ser particularmente sensible al ciclo económico, responde también significativamente a cambios en las tasas de interés.
Adicionalmente, indicó que ‘es importante consignar que más allá de las diferencias entre sectores, en todos ellos el subíndice de peor desempeño fue la expectativa sobre la situación del país, variable que se ubicó en niveles históricamente bajos’.
Y concluyó: ‘Estas cifras son consistentes con una recesión que incluso se podría profundizar los próximos meses’.
Los sectores de comercio, industria y minería experimentaron ligeros aumentos con respecto al mes anterior, mientras que el rubro de la construcción registró un ligero retroceso. Todos los sectores de la economía se ubicaron en niveles pesimistas, donde 50 unidades marcan una posición neutra entre resultados positivos y negativos.
Las presiones de salarios se posicionaron en un nivel superior al neutral (60,5 puntos); las expectativas sobre empleo aumentaron respecto del mes anterior (50,4 puntos); y la producción esperada se ubicó en 38,2 puntos, superior al mes anterior en 6,8 puntos. El uso de la capacidad instalada alcanzó un 80,9% de uso, similar al mes pasado. La inflación esperada se ubicó en 8,2%, inferior al mes anterior en 1,0 unidad.
Por su parte, la demanda actual alcanzó 32,6 puntos, inferior al mes anterior en 3,0 puntos. Los inventarios se ubicaron superiores al nivel deseado alcanzando 55,2 unidades; las presiones de costos alcanzaron los 53,9 puntos; la situación general del negocio llegó a 47,3; y la apreciación general sobre la economía chilena se ubicó en un nivel de 12,8 unidades.
Pablo Pincheira Brown, profesor asociado de la Escuela de Negocios UAI, manifestó que el avance de poco más de dos unidades en enero, versus diciembre, estuvo impulsado principalmente por una importante alza en el volátil indicador de minería, que pasó desde un nivel de 38,54 puntos a uno de 46,08. ‘A pesar de esta buena noticia, el IMCE presenta un nivel actual de 37,83 puntos, aún en pleno terreno de pesimismo, disminuyendo prácticamente 16 puntos desde igual mes del año pasado. Todos los indicadores individuales (Comercio, Construcción, Industria y Minería) también pisan de lleno el terreno pesimista, con valores de 42,95; 25,42; 36,35; y 46,08 puntos respectivamente’ comentó.
El profesional destacó que desde agosto de 2021 a la fecha el IMCE ha mostrado un comportamiento oscilante, pero dentro de una marcada tendencia a la baja. ‘En estos últimos 18 meses, las alzas mensuales más importantes fueron la de enero de 2022, mes en el que el IMCE subió 6,78 puntos, y la de septiembre del 2022, cuando el índice subió 2,78 unidades. Estas alzas pueden asociarse al nombramiento del actual ministro de Hacienda (enero de 2022) y a los resultados del referéndum de septiembre de 2022. En este período, el IMCE ha tenido 6 meses de alzas y 11 meses de disminuciones’.
Por su parte, Soledad Recabarren, socia de Recabarren Asociados y miembro del Círculo Economía y Finanzas de ICARE, señaló sobre el desempeño de este mes: ‘Si bien subimos el indicador en relación con el mes pasado, seguimos en rangos muy pesimistas, y con 15,5 puntos más bajos que el índice a igual fecha el año pasado’.
Añade que en la medida que el Gobierno va mostrando signos de moderación, los indicadores se mueven en sentido positivo; por ejemplo, la minería incrementó en 7,5 puntos su índice de confianza, pese a mantenerse aún negativo. ‘Esto podría deberse a que en el royalty minero se han corregido algunos temas que generaban mucha preocupación a la industria’, explicó. ‘Las expectativas de baja del tipo de cambio, reducción de la inflación, los avances concretos en materia constitucional, sumado a la época de vacaciones, han mejorado la confianza empresarial al inicio de este año’, agregó.
En tanto, Rodrigo Aravena, economista jefe de Banco de Chile, manifestó que ‘estas cifras son reflejo del fuerte ajuste cíclico que atraviesa actualmente la economía. Algunos de los elementos que destacan del informe de enero son el hecho de que todos los sectores se encuentran persistentemente en zona pesimista, dejando entrever que el debilitamiento de la economía es transversal y, por ende, no atribuible al deterioro de algún sector en particular’.
En este contexto, dijo, constituye una señal de advertencia la sostenida caída en el sector construcción, rubro que además de ser particularmente sensible al ciclo económico, responde también significativamente a cambios en las tasas de interés.
Adicionalmente, indicó que ‘es importante consignar que más allá de las diferencias entre sectores, en todos ellos el subíndice de peor desempeño fue la expectativa sobre la situación del país, variable que se ubicó en niveles históricamente bajos’.
Y concluyó: ‘Estas cifras son consistentes con una recesión que incluso se podría profundizar los próximos meses’.
Fuente: El Mercurio