Constructoras cierran 2022 con resultados positivos, pero mantienen cautela por riesgos e incertidumbre
De acuerdo a los últimos resultados publicados por Paz Corp, Ingevec, Echeverría Izquierdo y Besalco al 31 de diciembre del año pasado, todas estas firmas anotaron mayores ingresos y ganancias respecto del 2021. Paz reportó un 41% más de ingresos explicados principalmente por ‘un mayor volumen de escrituración en el periodo’ que en total alcanzó las UF 6,6 millones. E Ingevec percibió un aumento de 26,5% en ingresos debido a un alza de 79,4% en el monto escriturado proporcional habitacional respecto de 2021.
En tanto, Echeverría Izquierdo anotó un 25,6% más de ingresos a causa de un mejor desempeño de la unidad Desarrollo Inmobiliario, que registró un 103,6% más de utilidades que en 2021 ‘por la escrituración de unidades en 7 proyectos al cierre del año, ubicados tanto en Chile como así también en Perú’. Y Besalco no se quedó atrás, pues registró ingresos que superaron en un 29,2% los de 2021 a causa de ‘un mayor dinamismo en todos los segmentos’ y de la mayor escrituración del período.
Además, en el caso de Paz Corp, la compañía destacó que el 58,3% de las unidades del portafolio se encuentran promesadas o vendidas, y que de los 29 proyectos que componen el portafolio de proyectos de departamentos en Chile, 11 se encuentran en escrituración y 18 en desarrollo. Mientras que desde Besalco afirmaron que tienen ‘la tranquilidad de tener la venta del año 2023 respaldada’ por una diversidad de contratos, ‘lo que junto a una posición financiera sólida, acceso y confianza de las instituciones financieras de los países en los que operamos (…) nos otorga tranquilidad y confianza para el futuro’.
Y desde Echeverría Izquierdo mencionaron que la sociedad evalúa de manera continua sus inventarios, los requerimientos de terrenos y los potenciales negocios. Y que en la actualidad ‘existe un interés en aumentar el número de terrenos para proyectos inmobiliarios’.
Caen promesas y se mantiene incertidumbre
Sin embargo, no todo fue óptimo en los resultados. Según Paz, las promesas acumuladas a diciembre de 2022 disminuyeron un 53,3% respecto del año anterior, y la firma destacó el impacto de los movimientos del Banco Central que, en un esfuerzo por controlar los niveles de inflación, llevaron ‘a elevar la TPM a 11,25%, la máxima tasa esperada’.
‘Considerando lo anterior, y debido a que nuestro negocio es intensivo en el uso de deuda, cambios en la inflación, o en tasas de interés, pueden afectar de forma significativa los costos de dichas deudas, reduciendo el margen de los proyectos. A su vez, alzas en la inflación y/o alzas en las tasas de interés a largo plazo pueden influir en la postergación de decisiones de inversión o compra de viviendas por parte de nuestros clientes’, sostuvo la inmobiliaria.
En el caso de Ingevec, las promesas retrocedieron un 46,6% explicado por ‘un menor dinamismo de la industria, el incremento de las restricciones para acceder a los créditos hipotecarios, un incremento en los desistimientos y una menor oferta de unidades en blanco’.
Y si bien, durante este ejercicio no observaron ‘alzas de tasas relativamente fuertes’, sí mencionaron que en el área inmobiliaria se ha observado ‘cierta cautela en la aprobación de créditos hipotecarios, debido a la incertidumbre importada del mercado internacional y al enfriamiento de las economías emergentes’, entre otras cosas.
Besalco, por su parte, indicó que al igual que sus pares, las promesas cayeron un 35%, y anotó un mayor stock disponible y una baja considerable en el backlog de proyectos en ejecución, que pasó de alrededor de $24 millones en 2021 a cerca de $16 millones en 2022.
Además, desde la compañía comentaron que en Chile ‘los cierres de negocio han disminuido en forma importante, en línea con lo que muestran los estudios de mercado, salvo por una importante venta institucional que se realizó en el tercer y cuarto trimestre’. Y que en 2022, a diferencia del 2021, al no tener obras paralizadas, el impacto en los segmentos de obras civiles e inmobiliario se da principalmente por los mayores costos e ineficiencias asociadas a las medidas de prevención contra el Covid’.
Fuente: El Diario Financiero